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lunes, 20 de enero de 2025

Abandonando Twitter


 

Hoy es lunes 20 de enero de 2025 y es el día elegido por una parte significativa de la comunidad en Twitter para abandonar esta red social. Millones de usuarios llevan eliminando sus perfiles y migrando sus contenidos y comunidades desde hace meses. Miles de asociaciones cívicas lo están anunciando en los últimos días. Y hoy es el día clave.

La fecha no es casual. Hoy Donald Trump vuelve a ser presidente de Estados Unidos, y lo hace acompañado por Elon Musk, dueño de Twitter que reubatizó como “X” tras comprar la red social por 44.000 millones de dólares en 2022. Trump y sus secuaces parecen mucho más peligrosos, descerebrados, intransigentes y ultras para la paz mundial, la estabilidad social y la salud medioambiental del planeta que como se presentó hace 8 años, o hace 4 en el Asalto al Capitolio.

Las razones de la compra de Twitter por parte de Elon Musk no fueron empresariales. No estaba planteada para ganar más dinero. No inmediatamente. Se trataba de controlar el mayor zoco de opinión y participación colectiva del mundo, y desde él verter informaciones falsas, bulos y construir artificialmente un estado socio-político afín a los intereses de Trump y del fascismo. Y ahora con el mangante (no hay errata) ya re-instalado en la Casa Blanca, Musk y el resto de la cúspide de la élite de la élite, pasaran a cobrar y lucrarse mucho más del lamentable estado de las cosas.

Por ello se hacia necesaria una respuesta de la comunidad ante esta deriva. Lo primero es imperecedero reconocer que ante lo que se presenta como una red social, lo que realmente se trata es de una entelequia. Porque no hay red. La red, por definición, implica la existencia de una serie de nudos (nodos en terminología informática) iguales, en acceso y posibilidades. En que estos nodos se comuniquen de igual a igual, fluyendo la información en cualquier dirección. Y eso no existe desde el momento en el que pagando se consigue más visibilidad e impacto que quien no paga. Y ocurre aunque el contenido sea de más calidad. La información a penas ya no puede venir desde al lado o desde abajo; la que llega desde arriba apaga cualquier otra opinión o información.

Pero es que tampoco son sociales. Serán digitales, publicitarias o corporativas, pero no pueden ser sociales, porque los usuarios apenas tienen control sobre lo que se expone ante ellos, y mucho menos de lo que dejan tras su paso.

Y hay que cuidarse mucho y ser muy consciente de dónde se está participando como usuario a la hora de querer informarse. La novedad y fortaleza del twitter primigenio era la posibilidad de seguir los canales y cuentas que tu quieres. Modular la información que recibes, obteniendo la voz de los que no tienen voz o no reciben la atención necesaria y justa desde los medios de comunicación convencionales pertenecientes a emporios empresariales. La idea es completar la información y obtener contextos nítidos y certeros sobre el estado de las cosas. Esto era algo básico y que permitió flujos de información en todas las direcciones fomentando un activismo que consiguió muchas cosas. Sólo hay que recordar lo que estábamos haciendo en este país hasta 2016.

El riesgo en origen era construirse un paraíso artificial de voces que confirman nuestras opiniones e ideas. Burbujas estancas, libres de patógenos e interferencias. “Cámaras de eco” las llaman los profesionales de la psicología y medios de comunicación, donde el debate ideológico es inexistente y se pasa a la defensa de trinchera o fondo de estadio de fútbol, donde el zasca ingenioso y el insulto más aberrante bailan pegados para enfangar cualquier debate. Pero de alguna manera, combinando con la información mainstrean de los medios de comunicación de masas se podía uno construir un relato propio verídico y con un contexto certero. Por ejemplo, yo sabía y sé que Al Saad era un cabrón, pero que el pueblo sirio vivía mucho mejor, que como lo va a hacer bajo el yugo de unos islamistas radicales aupados por Occidente. Y así con todo.


La deriva de la red social Twitter es insoportable. Lo que hace casi 15 años nos sirvió a muchos para conectarnos, aprender y participar, hoy en día es un lodazal nauseabundo donde se ha perdido el respeto, la educación y hasta el más mínimo saber estar. Los ultras, sabedores que el algoritmo premia sus barrabasadas y que la moderación es o inexistente o les es favorable, intoxican cada conato de debate, manipulan hechos y crean polémicas de donde no las hay, absolutamente artificiales, y que impiden de facto poder hablar, y dedicarse, a los problemas de verdad y a cosas más placenteras. El odio hoy lo inunda todo y la manipulación ha crecido sin cesar, incluso antes de la llegada y el abuso execrable de la Inteligencia Artificial. Manoseando la libertad de expresión Twitter y las otras redes del capitalismo de Silicon Valley, permiten que el que más grite, el más ruidoso, el más violento se imponga y se oiga más que las posiciones más cordiales, moderadas y educadas. Y si el que más grita y más violento es, es además, el que más paga, el lodazal impide una participación en estas redes sociales de forma saludable.

La propia dirección ha lanzado y promovido la profusión de cuentas fake o bots que literalmente amañan los temas de interés en la red, alterando de esa manera los estados de opinión en el mundo digital, pero con claras reminiscencias a la vida política y social del mundo real. La manipulación de procesos electorales es tan evidente, como lo es el silencio de quienes piden las actas cuando no salen las cosas como quieren, pero que callan ante el manoseo del voto.

En general, las desconfianza ha crecido a la par que desaparecía la moderación y el control, ya no sólo por parte de la dirección técnica y de negocio de los propietarios de la red, sino incluso, del propio usuario. La bajada en la calidad de la aplicación es incuestionable tanto en los sistemas de búsqueda, como en los algoritmos que ofrecían recomendaciones, hasta el punto de convertirlos en absolutamente prescindibles y hasta evitables.

La información es interesada, caótica, ruidosa y provoca distorsión. Sirve como acicate para crear estados de malestar fundados en el odio al diferente que tenemos al lado. Promueve el individualismo más atroz, el machismo más trasnochado, dejando a las mujeres como objetos de uso y disfrute del hombre. El racismo y la xenobofia, y sobretodo la aporafobia hacen que el odio sea la vitamina que nutre cada día esta red social.

Como guinda del pastel, la publicidad, que ya venía creciendo poco a poco en Twitter, se ha disparado bajo el dominio de Musk, y ni siquiera configurar la privacidad evita el asalto constante de los anuncios que interrumpen la linea de tiempo, e incluso de los hilos que eran lo más enriquecedor de entrar en twitter.

Todos los usuarios llevamos tiempo instalados en la dicotomía de si abandonar twitter, o si seguir. Pensando en dirigirse a espacios virtuales más amables, incluido el “dejar” las redes sociales e internet, o si seguir para dar batalla a los imbéciles, a la ignominia y el fango. En continuar participando, es decir, subiendo nuestros contenidos, nuestras aportaciones y nuestros datos, para que la aplicación haga negocio, sin derecho siquiera a la réplica, y haciendo que nuestra propia conciencia y valores se vayan más abajo con cada anuncio nuevo que te bombardea.

Hay quien dice que con Twitter, y con las redes que usemos en un futuro, no deberíamos cometer el mismo error que se cometió con Facebook que ya se abandonó en masa hacia 2012-2013 por millones de usuarios progresistas y normales, quedando como campo libre para que los ultras y sectarios desplegaran su odio a raudales. Las victorias de Trump en 2016 o el propio Brexit bebieron mucho de esa fuente. El riesgo de que se repita la historia es alto, pero también llega un momento en que como ciudadanos es preciso distinguir dónde, cómo y por qué quieres dar batalla.

¿Quieres quedarte en un lugar donde el odio es favorecido y el anti-fascismo vilipendiado? ¿Vas a poder articular un activismo o una comunidad que permita plantear alternativas en el mundo real al fascismo y el capitalismo ultra? ¿Merece la pena quedarse y trabajar para un público cautivo que si sigue ahí ya es fruto de su pereza, e incluso de su propio interes?

Por supuesto, como en todo proceso de salida quedan atrás las cosas malas, pero también las buenas. Magníficas personas que participando y trabajando han promovido contenidos e informaciones interesantes e imprescindibles. Pienso en aportaciones brillantes y necesarias en Historia, ciencia, sociología, política, pero también en dónde voy a informarme de las cosas que me interesan como el rugby, el basket femenino, el atletismo, el ciclismo, la naturaleza, la música heavy o la literatura. En las cosas que pasan en Salamanca, o en el teatro local, aquí al lado. Pero llega un momento en el que es inevitable dar este paso. Las redes tienen su propio ciclo de vida, al igual que nuestra participación en ellas, y Twitter ya hace mucho tiempo que entró en la decrepitud más deplorable.


En mi caso, voy a aguantar la cuenta en “X” unas semanas más mientras completo mi usuario de Mastodon y cree uno para blue.sky que me permita conservar mi imagen en esa red ante posibles suplantaciones. Incluso es posible que en tiempo medio abandone cualquier red social incluidas las que parecen imposibles como whatsapp o youtube. Pero el hecho es que ya he puesto fecha de salida a twitter.

martes, 31 de enero de 2012

Nace el Quinto Poder





Tras visualizar este genial reportaje extraído del Documentos TV de ayer y rememorando y comprobando con amplitud el eco de todas las protestas que iluminan el planeta por la construcción de una sociedad mejor, más unida, social y justa. La revolución comunicativa que supone el hecho de expresar un mensaje, una opinión, o un hecho y que se transmita instantáneamente a cualquier lugar del mundo, ha devuelto al hombre, a la mujer, al ciudadano y ciudadana, una cuota de libertad (y también de responsabilidad) y una voz para denunciar injusticias y empezar una revolución de carácter global, que de momento sólo ha tenido efectos locales, pero que ha colocado en el disparadero una palabra: Cambio. Por eso, unir a las personas bajo una misma herramienta comunicativa y, desde allí, enviar las noticias de lo que está pasando debajo de tu casa, sea en Egipto, Túnez, España o EEUU puede llegar a todos los rincones del planeta. No importa ni como te llames, ni a que te dediques, ni siquiera si tienes muchos o pocos seguidores, estos son factores que ayudan a la difusión de tu mensaje, pero no son elementos indispensables para que tu mensaje llegue a los 5 continentes.

De ahí ha surgido el Quinto Poder. Un nuevo poder netamente ciudadano, del pueblo, puesto que los anteriores eran ejercidos por los mejor preparados ya fuera en el ejecutivo ejercido sobre un poder legislativo en el pueblo, pero que casi siempre escapa a los intereses de ese mismo pueblo; el judicial (ídem) y el periodístico, última y desgraciadamente demasiado ligado a la cuenta de balances de las empresas periodísticas.

Evidentemente con la generalización de internet en el primer mundo y con él la expansión de las redes sociales está otorgándoles a ellas mismas poder para influir sobre las personas. Asimismo son un medio de convocatoria prácticamente instantáneo. Por eso, pueden estar obteniendo un poder comparable a sus predecesores. En los últimos años tenemos ejemplos por los países donde han “llegado” a la población

Twitter y facebook son la punta de lanza las más reconocibles y con mayor inmediatez. What's up en la comunicación sobre terminales móviles y otras redes sociales como linkedin tienen su auge. Y los blogs, ofrecen información más extensa y trabajada, no tan inmediata, pero que extiende el poder del periodismo riguroso y dotado a cualquier ciudadano. Incluso con la tecnología como alida con cámaras y demás dispositivos para construir cualquier crónica, debate u opinión en cualquier instante, en cualquier momento. Estos canales alternativos de participación, implicación y colaboración ciudadana aún siendo concebidas como negocios, se han demostrado paradójicamente como herramientas prácticas para la concienciazión social, razonada, debatida y consensuada de la realidad del mundo, sus causas y consecuencias y alternativas.

Con más paradoja aún, resulta curioso como desde las estancias académicas el término Quinto poder, se ha aplicado a dos fenómenos muy distintos entre sí: la intervención económica del Estado (específicamente del gobierno) sobre el mercado, por un lado; y, por otro, los nuevos fenómenos sociales surgidos en torno a la red Internet. Es muy irónico que en las universidades se presente bajo un mismo epígrafe dos realidades distintas, enfrentadas y que incluso una de ella ha surgido como reacción frente a la acción de la otra.

El éxito de las redes sociales, no sólo se explica en la inmediatez, en la selección de la información que realiza el usuairo (uno se hace follower de quien quiere) y la transparencia; sino que además necesita del fracaso testado de los medios tradicionales, demasiado ocupados en su mayoría en satisfacer una cuenta de resultados y en mantener adormecida a la ciudadanía bajo opios y cortinas de humo, y convencida en una autocomplaciencia endémica y enfermiza basada en el consumismo y la distracción, como armas y a la vez valores del pensamiento único: el neoliberalismo.

Así el social media, surge y es utilizado, no sólo como un arma de publicidad y marketing de una empresa, sino que además viene a ocuparse y dar cuota de valor a los grandes olvidados del siglo XXI: las personas. A través de las redes sociales los ciudadanos dan el valor que realmente tienen con su trascendencia y calidad a las noticias e informaciones que reciben. Es decir, no sustituyen el periodismo, sino que lo complimentan, creándose incluso flujos de información hacia ambos lados periodista-lector. Gracias a las redes sociales, las campañas de presión han tenido un relieve increible llegando incluso a conseguir la transparencia y la rendición de cuentas en muchas administraciones o a exponenciar las filtraciones de Wikileaks. Así el ciudadano gana en confianza, deja de verse como un sujeto paciente en su devenir, y se convierte en un sujeto agente, fomentándose así las revoluciones, la movilización de la sociedad, o de buena parte de ella, para conseguir un mundo mejor.

El Quinto Poder está aquí. Y evidentemente los otros poderes intentan e intentarán mantener su cuota de poder. Desde las autoridades y bajo la llamada lucha contra la piratería se bloquean usuarios y herramietnas y se busca la aprobación moral por parte de la población, para así tener el poder real, para constituir leyes que permitan un control sobre algo que ha nacido sin ningún tipo de cortafuego ni frontera. Una internet libre, nos hace más libres, y nos aporta el conocimiento mutuo entre personas de cualquier parte del planeta. Y concienciados, organizados y motivados, somos muy peligrosos. Ante el feroz ataque especulativo y avaricioso del neoliberalismo más rancio, caduco y costumbrista, la respuesta fresca, nueva, activa, solidaria y regeneradora de la sociedad global.

No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros:

No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros I
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros II
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros III
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros IV
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros V
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros VI
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros VII
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros VIII
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros IX
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros X
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros XI
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros XII
No somos mercancía en las manos de políticos y banqueros XIII

miércoles, 24 de agosto de 2011

La Constitución es moldeable para lo que quieren: Está vez, denigrar el estado del bienestar


Zapatero se despide a todo lo grande. Acaba de proponer reformar la Constitución para fijar en ella un techo al déficit público. Es lo que mandaron Merkel y Sarkozy y, lógicamente, Rajoy está de acuerdo. Esto implica consagrar el neoliberalismo en nuestra Carta Magna, segando el camino a cualquier progresista que pueda llegar en un futuro al Gobierno. Es un error monumental que ni siquiera la “Biblia” neoliberal, el Wall Street Journal, consideraba que fuera posible en la vieja Europa: pretender fijar en las Constituciones un tope de endeudamiento es una medida de derechas que difícilmente aceptarán los Parlamentos de “las 17 democracias” –decía- afectadas por su pertenencia al euro. Desgraciadamente para nosotros fallaron. Seguro que lo están celebrando.

Pero, más papista que el Papa en cuestión de neoliberalismo, nuestro fracasado presidente se dispone a ponerlo en marcha de inmediato. Los países que guardan el espíritu de la vieja democracia europea –su inventora- que hagan lo que quieran, pero España ya acata… y siega el futuro. Después de financiar con dinero público el mensaje medieval de la iglesia católica con todo lo que ha traído y las irreconciables diferencias entre indignados y católicos, ciudadanía y políticos e instituciones, manifestantes y policía. ¿No estamos viendo que las políticas que siguen no funcionan? Estamos cayendo en una nueva recesión. Da que pensar que sea precisamente lo que buscan. No pueden estar tan ciegos. Pero es preocupante que esto coincida con la aplicación de la “mano dura”, como ha hecho Cameron en Gran Bretaña o… la policía española estos días sin ir más lejos.

Pero una reforma de la Constitución en un sentido tan grave no se puede hacer sin un referéndum como ha propuesto Gaspar Llamazares. No podemos consentirlo. Y arbitrando información adecuada a los ciudadanos para que no se dejen embaucar en la política del sonajero, que tan genialmente describe hoy Jesús Mota.

¿Qué desarreglo psíquico ha podido llevar a Zapatero a formular semejante propuesta para cuatro días que le quedan? ¿Cómo no le dimite el gobierno en pleno y cualquier militante del PSOE al que le quede una brizna de socialdemocracia en la sangre?

Está bien claro que la sociedad tendrá que tomar la iniciativa ante tanto desbarajuste: tenemos que exigir un referéndum, repito. Y arbitrando medidas para que exista información veraz. Traer incluso a Stiglitz y a Krugman a hablar en el Parlamento y en “prime time” de la televisión pública. Que expertos de todo tipo muestren las evidencias de los datos. Se diría que Zapatero ha perdido la razón, incluso la vergüenza.

Actualizo: Puede no tenerlo tan fácil como cree: “Si el Gobierno español decidiera asumir la exigencia franco-alemana, el camino para una reforma express se antoja casi imposible: solo con que se oponga una décima parte de los diputados, habría que disolver las Cortes y convocar referéndum“. Y las primeras voces, incluso en la bancada socialista han empezado a salir de debajo de las setas en las que los úlitmos años han estado metidos. Las voces discordantes en el partido socialdemocrata español existen.

Lo urgente es que nadie (sobre todo si eres trabajador) se deje embaucar por lo mismo de siempre. Ya sea el patriotismo, el terrorrismo utilizado como arma política, la religión, las costumbres, los toros, el fútbol y demás mierdas. Nos estamos jugando mucho. Tanto como la salud democrática del país para empezar. Esa que dicen que no hace falta mirar como pedimos los #indignados, porque es muy segura y fiable. Si esto no es poco, visto como están recortando gastos, sanitarios, farmaceúticos, en las pensiones, en las nóminas de los funcionarios, en educación pública, en ciencia, investigación o desarrollo, sin atajar la raíz del problema que es aplicar tipos impositivos con justicia y proporcionalidad, y evitar convertir a España en el país del empleo denigrante sin perspectivas y de baja productividad que tanto quieren en Alemania para tener vacaciones baratas y sitios lejos de casa donde emborracharse y destrozar el mobiliario urbano.

Nos jugamos la justicia social, que todos y todas tengamos realemnte las mismas posibilidades. Así de claro, rotundo y simple. Aprobar por bemoles constitucionales la imposición de un techo de gasto, sin referendum y tomándonos como gilipollas, es inaceptable, inadmisible y debería ya a estas horas, haber provocado ya no sólo, como decía que el gabinete de gobierno dimitiera, diputados, afiliados al antiguo PSOE, sino que ya tuvieramos un calendario de protestas enérgico y radical, para paralizar el país, y demostrar, una vez más, que el poder es el pueblo.

Lo que ayer fue anunciado en sede parlamentaria por el actual Presidente del Gobierno español, es decir, la reforma de la Constitución española para establecer una regla que garantice la estabilidad presupuestaria en el medio y largo plazo (sic), tanto en relación con el déficit estructural como en la deuda, puede ser considerado en la práctica como un golpe de estado constitucional en toda regla, un golpe de estado neoliberal.

Hasta ahora, la propia Constitución española, en su artículo 1, definía al estado español como un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. De ser aprobada la reforma constitucional presentada ayer por el señor Zapatero, y apoyada inmediatamente por el PP, tal artículo dejaría de tener validez, y debería, por tanto, ser también reformado, mediante un contenido que viniese a decir algo así como “España se constituye en un Estado neoliberal, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la sumisión de lo público a los intereses de lo privado, la injusticia social, la desigualdad y el pensamiento único”.

No hay democracia si gobiernan los mercados. Afirma una de las consignas lanzadas en la multitud de concentraciones y manifestaciones realizadas por el Movimiento 15M. Hoy hemos vivido como los mercados llegan incluso a toquetear con sus sucias manos las constituciones, donde antaño fueron sagradas, de los diferentes países.

Esto es un golpe de estado en toda regla: no veremos tanques, ni aviones de caza sobrevolando nuestras cabezas, pero si veremos mermados nuestros derechos sociales y nuestros derechos como pueblo en favor de los grandes lobbies financieros y las grandes empresas, supeditando así los privilegios de unos pocos frente a los derechos de millones de personas.

La reforma propuesta por la pinza Zapatero-Rubalcaba- Rajoy, que siguen los dictados de Ángela Merkel y Nicolás Sarkozy, pretende fijar “un techo presupuestario” donde se limita el gasto público ,institucionalizando así, las practicas neoliberales y las políticas de recortes sociales. Esta reforma, lo que pretende en sí, es mermar el dinero que el Estado invierte en lo público, y por consiguiente los derechos sociales, ya que derechos como la sanidad, educación, o las pensiones, se verán gravemente amenazados.

Si esta reforma es escandalosa, mayor aún es su forma de ser aprobada: sin referéndum vinculante y antes de que termine el mes de agosto. Es decir, una de las decisiones de mayor trascendencia social pasa por el parlamento sin debate alguno y sin consultar al pueblo soberano, para que las grandes empresas sigan ganando lo máximo posible en el menor tiempo posible.

El Movimiento 15M ha demostrado que la lucha sirve, por lo que ante medidas así tenemos que movilizarnos urgentemente, y dar un paso adelante en nuestras movilizaciones llamando a una huelga general. No podemos permitir que secuestren la democracia delante de nuestras caras.

Un golpe de estado realizado de manera repentina, en tanto y cuanto se llevaría a cabo en un tiempo no superior a un mes, sin debate público y sin contar en ningún caso con la opinión de la ciudadanía, quien la propia Constitución recoge también como supuesta depositaria de la soberanía estatal. Más antidemocrático, imposible.

Un golpe de estado realizado de manera violenta, en tanto y cuanto no solo es fruto de una imposición del poder político dominante al conjunto de la ciudadanía, sino que se haría sin que ninguno de los partidos implicados en el golpe lo hubiese propuesto de manera previa en su programa electoral, tal y como sería lo normal en una sociedad regida por un verdadero sistema democrático. Eso es violencia, violencia política.

Un golpe de estado que otorgaría constitucionalmente el poder del estado a los mercados y a las instituciones financieras internacionales (Incluida la UE, a todos los efectos una institución financiera internacional de funciones similares al FMI o el BM), y que acabaría de facto con los mecanismos vigentes para la sucesión del poder, en tanto y cuanto el pueblo dejaría de tener toda posibilidad de regir los designios políticos del estado, pasando estos a manos de un único y definitivo poder no votado ni elegido directamente por los ciudadanos, sino instaurado desde las esferas financieras y empresariales con la complicidad del falso poder ejecutivo y legislativo de turno. La Oligarquía financiera internacional pasaría entonces de ser un gobierno de hecho, a un gobierno de derecho, constitucionalmente impuesto.

En una situación como la actual, y en un estado con las condiciones estructurales presentes en el estado español, querer fijar constitucionalmente un techo de gasto, es simplemente anunciar que el estado será entregado en exclusividad, y a no mucho tardar, a los intereses privados, amén de que todo rasgo actual que pueda identificar al estado con algo así como un estado del bienestar, será borrado del mapa político de un plumazo. En resumen, lo que Zapatero y Rajoy han pactado de espaldas incluso a su propia militancia y una gran mayoría de sus parlamentarios, viene a ser algo así como que, ante determinados niveles de endeudamiento, todo lo que no sea aplicar un plan de privatizaciones de cualquier cosa que huela a público, y todo lo que no sea meter la tijera en cualquier cosa que huela a gasto público (gasto social en su mayoría), será anticonstitucional.

El techo de gasto o como despistar para acabar recortando servicios públicos

Creo que debemos comenzar a ridiculizar muchas de las afirmaciones que se escuchan de boca de tertulianos, “expertos”, y de políticas y políticos profesionales. Sobre todo por que todas ellas poseen una clara intencionalidad propagandística y un objetivo último, generalmente oculto.

Repite hasta la saciedad el profesor Navarro -entre otros- que una de las causas de la repercusión de la crisis financiera sobre las personas es el adelgazamiento de los estados en Occidente, en las potencias centrales y en Europa en especial, fruto entre otras cosas de las rebajas de impuestos generalizados a las fortunas, especuladores y detentadores de la riqueza en general. Igualmente en el endeudamiento de los estados, dado el esfuerzo hecho por estos para tratar de salvar a los bancos.

Esto anterior es cierto y es una de las más claras consecuencias de la REVOLUCIÓN CONSERVADORA. El origen de esta crisis, que no son solo las hipotecas basura, es de origen político.

Las ideas ultraconservadoras de Ronald Reagan y Margaret Thatcher eran, como diríamos ahora, globales, pues contenían aspectos para casi todas las facetas de la vida del planeta, siendo las que han traído estos lodos. Sus principales enemigos a batir fueron el estado del bienestar y los sindicatos, al objeto de lograr la desregulación económica y laboral y de esta forma iniciar una nueva era de crecimiento económico para el capitalismo, llevando al extremo las ideas liberales.

Las derechas conservadoras iniciaron una exitosa ofensiva ideológica, que contaminó a la socialdemocracia y dobló el espinazo a los sindicatos de las potencias centrales, insisto.

Creo por tanto que, si no iniciamos la lucha de las ideas, caeremos en un simple debate económico y de métodos, pero no iremos a la raiz del problema. Mientras que los ideólogos y centros de pensamiento derechistas y conservadores sí que han ido a imponer su visión del mundo. Que estén triunfando es otra cosa, porque los relativos fracasos de sus cruzadas en el mundo árabe o los BRICS -entre otros asuntos- son parte de sus fallos. Ni pueden imponer totalmente por la fuerza sus ideas, ni han podido imponer su total dominio mundial, al menos en la medida por ellos deseada.

Insisto en lo de las ideas, por que el neoliberalismo es una ideología política, de la que su gestión económica es parte. El objetivo final era el pensamiento único y esto se traducía en la supremacía cristiana conservadora y sectaria, exportar la democracia representativa de muy baja calidad vigente y desregular los mercados. En suma, el mundo era lo que era y por tanto propiedad de los imperios centrales y su visión de la vida.

Eliminada la URSS creyeron que el virus del comunismo y del socialismo y de las revueltas sociales finalizaría. Fracasado el mal llamado socialismo real -yo diría capitalismo de estado-, ya nada volvería a ser igual.

Pero los pueblos tienen capacidad de resistencia, de caer y levantarse, reorganizarse y nuevas formulas para volver a defenderse. Desde Seattle a Portoalegre surgió una nueva rebeldía, con nuevos cánones, nuevas propuestas y nuevas formulas organizativas, contando además con un importante aliado (por ahora) en la Red.

La respuesta política está presente por parte de los pueblos y así del Caracazo a los piqueteros argentinos, Génova, de las revueltas del agua de Cochabamba a la defensa de las pensiones francesas, de la revolución tunecina a la egipcia, de las plazas de Catalunya, el Carmen, las setas o Sol a la plaza Sintagma, todo es parte de una lucha global frente a la agresión mundial contra las personas y la madre tierra. Todo nació en la City, la Universidad de Chicago o Wall Street. Todo comenzó a tener respuesta entre los y las oprimidas de los barrios de Caracas, Buenos Aires, o las personas con dignidad de Europa, África, Asia. Todas nos abrazamos en Portoalegre y comenzamos a caminar, respetando los tiempos, las fuerzas y las posibilidades de cada cual, así como su inventiva, su propio origen, tan diverso como plural.

En mi opinión todo se contagia y el virus de la red ha sido decisivo, pero ojo, también sin él se ha reaccionado. Algunas os preguntareis a que viene esto con el título; pues viene a que tenemos armas mentales e ideas para rebatirles, no solo las ideas centrales, sino también lo cotidiano y que el neoliberalismo es un gran fracaso. Es la historia de una gigantesca estafa mundial.

Estos días en el estado español el debate es el gasto público, también la nueva estafa, ADVIERTO. Es la excusa de una nueva batalla entre las distintas fuerzas políticas y económicas que detentan el poder en el estado español y yo me pregunto ¿Por qué la discusión es cuanto gastan los gobiernos locales, autonómicos y el central y no cuanto y de donde ingresan fondos para mantener los servicios y prestaciones públicas? La excusa de los coches oficiales es un engañabobos. Pensad que un camión de bomberos, una ambulancia, un camión de la basura o un autobús de línea pueden ser coches oficiales (de hecho en su inmensa mayoría lo son), el problema es si se gasta bien o no, y si se recauda con justicia y de forma redistributiva o no.

La transparencia en el gasto exige democracia participativa, es su única garantía y aún así… Luego o se cambian las reglas del juego o a estas alturas ya nada es de fiar. Durante años el PP y el PSOE, desde el gobierno, han rebajado impuestos que han beneficiado a las grandes fortunas y transnacionales. Hemos participado y participamos en guerras neocoloniales costosísimas, que no nos podemos permitir y hemos vivido gobernados de facto por los bancos privados y oligarquías tradicionales en el reino de España. Ha sido el imperio del frentismo.

¿Qué es lo que se nos está inculcando?, Pues la disminución de la salud, la educación, las pensiones públicas y despidos masivos en el sector público. Esa es la traducción de todo y cuando uno de los gritos más coreados en las marchas y manifestaciones de las personas indignadas y activistas sociales ha sido “esta crisis no la pagamos” el llamado techo de gasto es la nueva fórmula, para que si la paguemos y encima a gusto. Todo con la excusa de sanear las cuentas públicas, que ciertamente hace falta, pero como y a costa de quienes.

¿Cuándo se van a exigir cuentas a los bancos y banqueros privados? ¿Cuándo se perseguirán a los operadores privados con operaciones en Paraísos Fiscales? ¿Cuándo se suprimirán las SICAV? Y finalmente ¿Quién pide un techo de gasto para tanto delincuente financiero? Los y las tertulianas no se ocupan de ellos. Que no nos engañen más.

lunes, 30 de marzo de 2009

Haciéndome un facebook, un tuenti...

Parece mentira que un informático deambule por el siglo XXI sin tener un perfil creado en una red social; pero como la vaguería también es santo y seña de mi personalidad, así estaba yo... Ayer enfrascado en la somnolencia vespertina, el tedio dominguero y el colapso etílico en la boca de mi estómago dedique parte de la misma (antes de salir a seguir privando) a crearme un perfil en facebook, ir añadiendo o encontrando a los amigos y amigas (también a alguna que otra conejita, jeje) e indagar sobre las visicitudes de esta red social... Así se fueron agregando los distintos y distintas, y tendrán que seguir haciendo, amén de encontrar a los que se me están escapando.

Y dentro de esta batalla entre todas las redes sociales, pues resulta que es aconsejable también hacerse un tuenti, y en esas en tratar de sacar tiempo para rellenar los formularios y todo aquello que me piden, y con la titánica tarea de encontrar alguna foto en la que no rompa la cámara. jeje.

Y bueno, contar que otro finde fantástico con los colegas y la noche como aliada. Con David, este guardia civil, jeje, de vacaciones, siendo el estilete de la fiesta, y el jolgorio, y con todos, y digo todos, empeñados en soliviantar a las ajenas, y bañar nuestras gargantas... Qué dure mucho

Por cierto, renovado, y con trabajo hasta finales de julio...

Camareros: Necesarios, degradados y precarios. Una experiencia personal

Ahora que ya está aquí el veranito con su calor plomizo, pegajoso y hasta criminal, se llenan las terracitas para tomar unas...