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lunes, 16 de julio de 2018

La España vacía: Retrato de una injusticia secular

En las montañas, la llegada de una carretera casi siempre ha servido para facilitar la fuga de los vecinos y no la llegada de los nuevos.


Cayó en mis manos La España vacía, el libro, mitad ensayo, mitad novela de viajes de Sergio del Molino, periodista aragonés, que nos invita a sumergirnos con él en la realidad de ese país dentro de nuestro país, en el que la despoblación, los prejuicios y el más absoluto desconocimiento propiciado por los medios de comunicación, se nos oculta y deforma.
Esa España desconocida, de autovías sin tráfico y carreteras comarcales mal asfaltadas y peor atendidas, existe y se muere según escribo estas líneas y tú las lees. Esa España retratada a conciencia como bárbara, cutre y con condescendencia bucólica, se pierde sin más, sin importarle ni a las mayoritarias poblaciones urbanas, ni tampoco a políticos y partidos, pero también y por qué no decirlo, en ocasiones sin importarle a quienes viven allí.
Es evidente que el triunfo del capitalismo, como modo de organización de la sociedad, se basa en la supremacía de la ciudad por encima del pueblo y del medio natural. Lo es en las relaciones y servicios que reciben habitantes de uno y otro territorio, y con el tiempo se ha demostrado, como “necesario” para el buen funcionamiento del capitalismo ultra liberal, el desmontaje de los usos y modos de vida del mundo rural, donde hoy vemos cientos de miles de hectáreas dedicadas al sector primario abandonadas y sin posibilidades de rentabilidad, mientras nos alimentamos con productos traídos desde miles de kilómetros, simplemente porque ofrecen una rentabilidad inmediata al empresario-explotador y al financiero-especulador.
El mapa que aparece a continuación muestra un fenómeno que no es ajeno a ninguna otra parte del mundo: La concentración de población (y por lo tanto de riqueza) en las zonas urbanas, frente a las zonas rurales.


Pero en España adquiere ya tintes dramáticos donde la mitad de la población se aglutina en un puñado de centros urbanos, donde destacan las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona.
Nuestros desequilibrios demográficos son especialmente graves en más de la mitad del territorio nacional. En 268.083 kilómetros cuadrados de nuestra superficie, el 53% del total, solo vive el 15,8% de la población, y todo indica que este último porcentaje sigue cayendo. En el Real Decreto por el que Rajoy creaba un Comisionado del Gobierno frente al reto demográfico se recordaba que 10 de nuestras 17 comunidades autónomas cuentan con un saldo vegetativo negativo de población.
En un informe de enero de 2017, la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias) llegaba a la conclusión de que más de 4.000 de los municipios españoles -es decir, la mitad del total que tenemos- se encontraban en esa fecha “en riesgo muy alto, alto o moderado de extinción: los 1.286 que subsisten con menos de 100 habitantes, los 2.652 que no llegan a 501 empadronados y una parte significativa de los más de mil municipios con entre 501 y 1.000 habitantes”.
Desde la misma Federación se ha impulsado un estudio con la Universidad de Zaragoza, donde su catedrático Francisco Burillo desarrollaba en sus estudios la llamada Serranía Celtibérica (una amplia región española en torno a las montañas del Sistema Ibérico que va desde las provincias de Valencia y Castellón a las de Burgos y La Rioja, pasando por Cuenca, Teruel, Guadalajara, Zaragoza, Soria y Segovia), el profesor Burillo y sus colaboradores son aún más contundentes. Denominan a la zona como la Laponia del Sur y afirman: “Con una extensión doble de Bélgica, sólo tiene censada una población de 487.417 habitantes y su densidad es de 7,72 hab/km2. Cuenta con el índice de envejecimiento mayor de la Unión Europea y la tasa de natalidad más baja. Este desierto, rodeado de 22 millones de personas, está biológicamente muerto”.
Las diez provincias de la Laponia del Sur son solo una parte de la España vacía. Hay muchas otras provincias con zonas despobladas y en trance de quedar “biológicamente muertas”: Orense, León, Zamora, Salamanca, Ávila, Palencia, Ciudad Real…
El vaciamiento de la mayor parte del territorio español, además de provocar un grave problema de desequilibrio socio-territorial, compromete también las cuentas públicas –encarecimiento de los costes de prestación de servicios públicos y sostenimiento de infraestructuras-, y supone una pérdida de potenciales activos de riqueza por el desaprovechamiento de recursos endógenos”, afirma la FEMP en su informe. Y añade: “Constituye un error considerar que invertir en el re-equilibrio territorial y en la lucha contra la despoblación es un coste. Ha de ser entendido en términos de derechos de la ciudadanía a la igualdad de oportunidades y a su propia “tierra”, y de los territorios a contribuir con sus mejores fortalezas al crecimiento de su comunidad y su país. Es, pues, una inversión en cohesión social y territorial y en fortaleza y sostenibilidad del modelo económico y social”.
Apenas tres meses después de su informe, la FEMP proponía un amplio listado de medidas para resucitar a la España vacía y biológicamente muerta o camino de estarlo. Desde crear una mesa estatal contra la despoblación y una estrategia conjunta de todas las administraciones públicas hasta recuperar la Ley de Desarrollo Sostenible, incorporar de forma explícita a los Presupuestos de cada ejercicio de todas las administraciones públicas una estrategia demográfica, dar incentivos y bonificaciones fiscales a quien invierta en las zonas despobladas, impulsar sellos de calidad territorial para la producción local, gestionar viviendas ahora vacías, establecer por vía legislativa una carta de servicios públicos garantizados para los ciudadanos de dichas zonas o incluso lanzar un plan que reduzca la brecha digital entre la España despoblada y la España urbana.
La lucha contra la despoblación –añaden en la FEMP- no es un fin. Es un medio para hacer el planeta más sostenible. Es parte de las políticas de sostenibilidad medioambiental. Es más sostenible repartir la población que concentrarla”.


Las causas y razones por la que al mayor parte del territorio nacional, languidece y muere nos llevan a remontarnos a otras épocas históricas. Desde los asentamientos para establecer una malla en la Península Ibérica planteados por el Imperio Romano, a las repoblaciones con normandos durante la Reconquista o los intentos durante la -escasa- Ilustración española, o los nuevos pueblos del franquismo.
Sin duda alguna el gran motivo que explica el atraso y con el la retahíla de prejuicios y dificultades que atraviesa el mundo rural español se muestra en la estructura social de nuestros pueblos, comarcas y también provincias.
Desde siglos en la estructura socio-política de estos territorios se hicieron fuertes elementos propios de un caciquismo rural, prácticamente medieval, apoyado en gran medida por la iglesia católica española, que lejos de desmantelarse en un proceso de democratización normal, se rearmaron, solidificaron y afianzaron, convirtiéndose en los famosos barones territoriales de los grandes partidos nacionales.
Estos, por su agresiva avaricia de poder y dinero y para poder sobrevivir políticamente, montaron redes clienterales que convirtieron el reparto de ayudas, tanto estatales como las de la PAC (Política Agraria Común de la UE. Estas ayudas reciben una crítica feroz por parte de sindicatos agrarios porque se aplicaron sobre un reparto de la tierra medieval, donde pocos propietarios de carácter nobiliario recibieron ingentes cantidades de dinero que no invirtieron en explotaciones agrarias) en una fuente de nepotismo y negocios turbios que lejos de paliar las seculares deficiencias en servicios y futuro de los pueblos y del mundo agrario y rural, las profundizaron hasta convertirlas a día de hoy en casi irreversibles.
Bajo este escenario se hace natural y hasta comprensible la marcha de los jóvenes de los pueblos de la España rural, ya no sólo como proceso de emigración campo-ciudad, sino como huida hacía un “mundo” más amable y fácil para llevar a cabo un proyecto de vida.
El otro gran motivos que ha llevado a que durante la historia se hayan hecho tantos intentos por repoblar el país, o mejor dicho, repartir la población en él, como método de cohesión y sostenibilidad económica, social y en último término medioambiental, esta la calidad de los suelos. La España vacía, es a su vez la España del secano, de los cultivos de bajo rendimiento, lo que sumado al reparto de las tierras que sin excepción y de manera histórica ha estado siempre en manos de muy pocos terratenientes, ha matado la posibilidad de desplegar un sector primario que mantuviera a la población fijada en los entornos rurales.
Sólo ahora, en los últimos años y por primera vez en la historia, surgen en España, pequeños propietarios que bien por iniciativa propia apoyada por capital financiero (eminentemente las cajas rurales) o bien desde cooperativas, impulsan productos alimentarios capaces de crear un empleo con la calidad y estabilidad suficiente como para fijar población y que esa población sea joven que quiera realizar ahí su proyecto de vida. Es la manera de atar servicios en los pueblos y las comarcas, y la única forma de que el bienestar y por lo tanto el futuro del mundo rural español no se vaya a pique.
Lamentablemente son unos pocos “salvavidas” en medio del naufragio del campo español, que sigue siendo, y hasta que no haya un cambio conceptual en los urbanitas y sus políticos, el terreno para las tropelías, los basureros y las industrias sucias y sin respaldo social que necesitan las ciudades.
Al calor de la especulación no faltan proyectos, casi todos ellos en el sector de la minería que dejan al mundo rural como subsidiario de las necesidades del mundo urbano y muy especialmente de los intereses de unos pocos burgueses acumuladores de capital.
Es el argumento de Bienvenido, Míster Marshall repetido en bucle. Cientos, tal vez miles de pueblos que reciben entusiasmados a cualquier portador de gallinas de huevos de oro. Los tiempos de la especulación urbanística, a finales de los años 90 y principios de la década de 2000, alentaron una especie de fiebre de hormigón. Cualquier huerta arruinada heredada de los abuelos podía ser fuente de riqueza. Cualquier parcela podía interesar a los constructores de fantasías, aeropuertos y autopistas. En La Mancha hay municipios que han llegado a competir para quedarse con un cementerio nuclear.”
El entrecomillado anterior es un extracto de La España Vacía. La negrita final es de mi propia cosecha, para destacar el acierto del autor al mostrar como muchos de los regidores que tienen y han tenido los pueblos y provincias de la España despoblada, han primado por encima de todo, en primer lugar, el interés personal en hacerse rico -probablemente para huir del pueblo-, y en segundo lugar, ya en éste momento crítico, para tratar de introducir unos pocos euros y unos pocos empleos, para hacer que tales pueblos y territorios no acaben de morirse. Un clavo ardiendo (y radioactivo) que es el perfecto pan para hoy y hambre para mañana, pues como ya hemos visto en muchas ocasiones, adoptar tales proyectos, propuestos por las muy urbanas especulaciones financieras, es legar todo un patrimonio natural y un patrimonio histórico y etnográfico para intereses ajenos al bienestar y el futuro del mundo rural, de la España vacía y de sus habitantes.


Una preciosa calle en el bello pueblo de Rubielos de Mora, en la comarca de Gúdar-Javalambre, en la provincia de Teruel.

miércoles, 6 de marzo de 2013

En la muerte de Chávez


El pasado 5 de marzo, hoy hace 7 días, fallecía víctima del cáncer, Hugo Chávez, presidente electo y reelegido democraticamente de Venezuela y lider de la Revolución Bolivariana. Y por lo tanto, era imperecedero escribir en mi pequeña bitácora a la red una entrada sobre este sucedo de gran importancia a nivel internacional y a nivel revolucionario. Durante todos estos días, en #Españistán, he podido leer bastante y ver algo de televisión, intentando huir de los debates sesgados ideologicamente, que en la amplia mayoria viran hacia la extrema derecha, clasista, xenófoba y/o neoliberal. Y he encontrado dos posturas diametralemente opuestas y en la que brillan por su ausencia los puntos de unión. Por un lado tenemos a los nostálgicos del regimen anterior, vasallo y cómplice del imperialismo yanki y que sumió a la población venezolana en la podredumbre y en unas cuotas de democracia nulas. Y por el otro, las opiniones de los que lloramos la muerte de Chávez, no sólo como símbolo de lo que Venezuela es hoy (el lugar del mundo donde más ha crecido la capacidad adquisitva de la clase media, según datos de la Agencia Mundial del Desarrollo, del año 2011), sino también como estandarte de una revolución popular, quizás cercana al populismo, pero sobretodo y netamente de izquierdas, que primeramente entendía a la población como garante y poseedora de la soberanía nacional y de su propio destino, para un fin último que era mejorar en la medida de lo posible las condiciones de la mayor parte de la población.

En primer lugar me voy a centremos en la situación de Venezuela, y por supuesto de venezolanos y venezolanas, porque considero que en cualquier proceso, por encima de cualquier cosa, de cualquier teoría y dogma, están las personas. Antes de que Hugo Chávez ganase las primeras de las muchas elecciones que ganó, Venezuela había sido siempre una colonia de las diversas potencias a nivel mundial, ya fuera España cuando era parte de su imperio, o Reino Unido y Estados Unidos desde su independencia. En los años 80 y 90 en Venezuela se vive en una situación de inestabilidad total (para ejemplo sirva el "Caracazo" en 1989), y de pobreza aún mayor, pues los ingresos de una de las mayores potencias petrolíferas del mundo no servían a los intereses de la mayoría de la población venezolana, sino a incrementar la desigualdad y la riqueza de la gran burguesía venezolana (muy unida a los criollos de tez más blanca), así como, sobre todo, de las grandes multinacionales extranjeras. En esa situación, además, se suman las duras políticas que impone el FMI neoliberal que aplican innumerables recortes, subidas de servicios públicos, aumento de precios y bajada de salarios ( a mi esto, mientras me he documentado sobre Venezuela y su historia, me suena como que bastante cercnao), con lo que la situación se vuelve insostenible a nivel social (no sólo en Venezuela, sino en el conjunto de América Latina como demuestran episodios posteriores en países como Argentina o Uruguay). Y así, en esa situación, llega Hugo Chávez al gobierno tras ganar las elecciones de 1998.

Bajo el gobierno de Hugo Chávez, se rompe con las políticas del FMI y se inicia un indudable proceso democratizador, que tiene como eje la redacción de una nueva constitución. Como ejemplo de este proceso valgan un par de datos, como son la convocatoria de tres referéndums en apenas dos años del primer gobierno, y el convocar nuevas elecciones en Venezuela antes de que acabase su primer mandato. En su segundo mandato Hugo Chávez se enfrenta decididamente con las grandes empresas de su país y tiene en la oposición a la patronal, la cúpula de la iglesia y las grandes potencias extranjeras debido a la realización entre otras cosas de la Reforma Agraria y la Ley de Hidrocarburos, que quitaban poder a aquellas minorías que lo habían concentrado en las décadas anteriores. Eso conlleva el golpe de Estado de 2002, dirigido desde la oposición por los grandes empresarios y medios de comunicación, que es derrotado gracias al inquebrantable apoyo popular.

Desde el golpe de Estado, el gobierno de Hugo Chávez ha continuado avanzando en un contínuo proceso de Revolución democrática, ganando proceso electoral tras proceso electoral, convocando varios referéndums (perdió uno de ellos, y en otros varios, no consiguió la mayoria social que buscaba). Resultan significativas al respecto de la democratización las declaraciones de Jimmy Carter (ex-presidente de EEUU y fundador del Centro Carter) que manifestaba ciertas dudas allá por el año 2000 sobre los procesos electorales en Venezuela y que años después afirmaba que con las mejoras del sistema introducidas por Chávez el de Venezuela "era el mejor sistema electoral que él había conocido" (significativo viniendo de alguien cuyo centro se dedica a observar procesos electorales).

Además de esto, hay numerosos datos de organizaciones internacionales que reflejan lo que ha significado la política de Chávez, por un lado la reducción imparable del índice de pobreza y por otro el aumento de la tasa de alfabetización son dos de los más significativos, y que reflejan una orientación de las políticas en favor de aquellas personas que menos tienen y en contra de aquellos que más tenían, como refleja que la oposición a Chávez sea encabezada por las grandes fortunas y empresas venezolanas y extranjeras.

Estos grandes éxitos en la política interior no deben de inferir en las críticas. Al aumento del nivel de vida y mejora de las condiciones de la mayor parte de la población, le sobrevino un aumento de la violencia en las calles, propagándose en bandas callejeras que atrían a los jóvenes y a un complicado control de armas. También en el lado de la libertad de expresión, Chávez recibió innumerables críticas, por un yugo puesto a las opiniones en periódicos, radios o televisiones opositaras a la política que la Revolución Bolivariana emplazaba, opuesto al control que el chavismo tenía de la mayor parte de medios. No cabría esperar ni un segundo a comentar que esas voces discordantes en los medios venezolanos con la política de Chávez, están financiados con dinero del anticastrismo en Miami y de las coorporaciones multinacionales (tanto petrolíferas como alimenticias) que prefieren una América Latina (granero y depósito de los Estados Unidos) dóciles y controladas. Y no sólo eso, sino que tal supuesta mordaza no se corresponde con la realidad, como han puesto de manifiesto numerosas organizaciones internacionales, algo que los medios neoliberales y fascistas de medio mundo, y ampliamente mayoritarios en Occidente han ocultado lanzando mentiras sobre la legislación en internet y medios de prensa e información en Venezuela.

Ya saliendo de Venezuela, Chávez sin ninguna duda encontramos el mayor éxito de su vida: Chávez ha sido el impulsor de una serie de alianzas en América Latina que han posibilitado la independencia de muchos otros estados de las políticas dictadas por el FMI, y salir poco a poco a esta región de un estado de dependencia económica total y absoluta de Estados Unidos, que se traducía en una situación casi colonial. Todo esto, ha posibilitado así mismo una estabilidad en la zona como pocas veces antes había tenido.

Al calor del petróleo nacionalizado venezolano y con el apoyo de la Cuba comunista, Chávez inició un camino en América Latina, que se antoja inevitable y próspero. Por primera vez desde que un blanco piso aquellas tierras, los puesblos autóctonos, los índigenas adquierieron la importancia que merecen, ni más ni menos que la de otros colectivos sociales, y con ellos nació la justicia social en el continente. Llegaron al poder índigenas, primero en Venezuela, y luego la Bolivia de Morales, el Ecuador de Correa, o la Nicaragua de Ortega; o el Brasil de Lula, seguido en sus políticas sociales y empeño por Dilma Rouselff. Argentina con el mandato de Cristina Fernández de Kirchsner. E incluso en Colombia, el último reducto, pero el más fuerte por sus connotaciones comerciales, del imperialismo yanki en latinoaméricana, el izquierdista y ecologista Ollanta Humala luchó en unas elecciones bastantes oscuras, con el candidato oficialista.

Es curioso que en menos de una semana hallan fallecido las dos veces más representativas de la izquierda, e incluso de una revolución social y democrática. Seguro, hasta el momento el mandatario político más influyente en el siglo XXI y referente para latinoamérica en su lucha ocntra la opresión y el explio de sus vidas (como lo fue Fidel en los 50, el Che en los 60, Allende en los 70 o el subcomandante Marcos en los años 90). Pero lo cieto es que mientras en latino américa fallecía el presidente reelgido y electo de Venezuela, Hugo Chávez, en Europa, lo hacía un filósofo, un pensador, un teórico, Stephane Hessel.

Quiero plasmar esta analogía en este instante, donde en Europa, entre otros factores, pero al calor del Estado del bienestar y la evolución social y cultural, la población perdiendo sus derechos y dignidad se moviliza sin un líder claro, mientras en America del Sur, los pueblos degradados per se y que nunca tuvieron dignidad ni estado del bienestar, consiguieron en una figura, un líder, mejorar su vida y dar pequeños pasos pero seguros y provechosos para el bien común a través del socialismo.

Resumiendo y de manera inevitable, se podrán hacer críticas al gobierno de Hugo Chávez, y su política pues podía haber sido más radical en sus políticas y emprender un camino más decidido hacia el socialismo; podía haber sido más simpático o políticamente correcto, y seguramente podría haber hecho cosas mucho mejor, pero sus logros están ahí y creo que es justo valorarlo, así como ser capaz de diferenciar críticas con sentido y críticas que provienen de  medios y sectores con importantes intereses comerciales y económicos en Venezuela, y que demuestran además importarles una mierda lo que sufra o padezca el pueblo, ya sea en Venezuela, España o Afganistán, con tal de quedarse con todo el pastel, y más ahora que en España estamos sufriendo brutalmente las consecuencias de los intereses de esa mafia económica y financiera que intenta (y muchas veces consigue) doblegar gobiernos y postrarlos ante sus intereses.

Por todo ello, soy de los que, precisamente por ser objetivo, llora la muerte de Hugo Chávez y desea que el pueblo venezolano siga con la revolución democrática ya emprendida y pueda algún día hacer que esta se convierta en una revolución socialista.

D.E.P. Hugo Chávez. Hasta la vista Comandante!

y
Viva los pueblos latinomaericanos en su lucha por la Libertad y la Justícia!!    

miércoles, 14 de marzo de 2012

¡Comprometeos!





El autor intelectual del célebre movimiento mundial de indignación juvenil, el nonagenario Stéphane Hessel, cree que es el momento de pasar de la indignación al compromiso. Del movimiento de los indignados, al movimiento de los comprometidos. Ha llegado ya la hora para una vez adquirida la confianza y el valor para transformar futuro y mundo, asumir un cuerpo reivindicativo, justo, solidario y social para a través de la lucha pacífica y la resistencia, con las armas adquiridas durante toda la historia de la lucha obrera (y si, hablo de las huelgas; y si, no de un día, sino de varios y muchos...) para obligar a la oligarquía a dar el mínimo exigible para mejorar la vida de todos os seres humanos hasta un punto de dignidad, suficiente para llevar una vida digna bajo un civismo inteligente, un pacto social de verdadera libertad y naturaleza humana, que tenga como paso inexorable el destierro del egoísmo más repugnante y con él del capitalismo más recalcitrante en aras de conseguir un mundo mejor, más sostenible, igualitario y libre.


Tiene razón. Y es el momento de que todos aquellos que pensamos igual, del 15M, Democracia Real YA y todos los demás movimientos sociales y ciudadanos nacidos bajo el calor del Indignaos y ya hoy adoslescentes cercanos a la madurez, hagamos lo posible para ese sueño: Ese mundo mejor.

Para empezar no estaría mal, y aunque sólo fuera por salud pública, ridiculizar, clamar y desenmascarar la farsa grotesca y el esperpento que son las cumbres y reuniones "de máximo nivel" de dignatarios europeos que siguén reuniéndose de forma continúa y a gastos pagados para convencernos sin el más mínimo éxito de la necesidad de la austeridad brutal, el error de que es inviable una Europa con el déficit permisivo y por lo tanto hay que reducirlo a limites inhumanos que pasan por denigrar la igualdad y con ella a millones de seres humanos, para cuando le de la gana a la banca, se puedan crear algún que otro puesto de trabajo de perfil bajo y escasa productividad, y en ese momento dejar de ser pobres, para ser algo menos pobres, pero pobres a fin de cuentas. Tampoco estaría mal decirle a Rajoy y su tropa de acólitos que se cuadran ante cualquier banderola española, que su nacionalismo no vale nada, porque esta falseado por su avaricia, su asidero al cargo y su esquilme de los recursos públicos, y que además queda ridiculizado hasta la mofa cuando toda la soberanía española, la UE de sus "colegas" neoliberales y populares se la pasaron por el forro del Euro. Y por supuesto decirle clarito las cosas con las que no se juegan. La sanidad, la educación, los derechos sociales, públicos y libres, para todos, sin tener en cuenta ni su capacidad económica, ni tampoco su ideología. Rajoy no ha demostrado que los recortes, tal y como dice son justos, necesarios y equilibrados. Eso a parte de decirlo hay que demostrarlo, y como no puede, y encima no le da la gana, es el momento de empezar a acortar esta legislatura de cara-dura en la que no tienen intención de "sacarnos de la crisis" sino de perpetuar un modelo obsoleto e injusto, de adelgazar el sector público, en vez de hacer todo lo contrario, fortalecerlo a base de pactos sociales que nos conviertan a todos y a todas en iguales, paso previo, claro e inevitable, por la política fiscal progresiva y necesaria, la lucha contra la corrupción y el fraude fiscal, y no menos importante la audiotira continúa, clara y abierta a consulta de cada euro, céntimo recaudado y gastado.

Quizás el posicionamiento ante las elecciones andaluzas y asturianas de dentro de unos días, sobra porque ya es conocido, pero no esta de más desenmascarar también al "Señorito andaluz" de Arenas, cobarde por negarse a debatir en Tv. y dejar claro a andaluces, y también a asturianos con los neoliberales socialistas, peperos o de cascos, si tendrán en cuenta todas las mentiras, todas las promesas incumplidas y todos los derechos usurpados al pueblo y entregados al costumbrismo, el capital y las oligarquías, en vez de dejarse engañar por la falsa alternancia, los corruptos, los ladrones, los inútiles, que eso sí, y como es costumbre, estarán acompañados de su continuo futbol para evitar que se solivianten las voluntades. Es también el momento de posicionarse y UNIRSE a la huelga general. Y esa unión no puede ser con fisuras y diatribas ideológicas, porque eso nos debilita. Somos izquierda, somos progresismo, y también son bienvenidos ideologías conservadoras... Porque los une, y no debe de ser serparado jamás por debates, es que somos trabajadores, y en este caso, trabajadores atacados y tomados por gilipollas. La Reforma Laboral es un atentado a la dignidad del trabajador, a su estado de bienestar, una vuelta de tuerca más a la estafa diaria y corrupta del neoliberalimo y el capitalismo, y no puede quedar impune. Y para ello, es vital y dará un éxito más rápido, fuerte e irreversible si todos los que estamos en contra y queremos vivir en un estado con un contrato social y laboral de valor, salimos a la calle a gritar las mismas consginas de manera conjunta, aunque nos refugien pancartas de diferentes colores. La huelga general del día 29 es un buen momento para la unión de toda la izquierda de este país. La política fragmentada en parlamentos bajo banderas y regiones medievales; la sindical y obrera que tiene a sus bases y demás masa laboral cabreada con sus direcciones; la del 15M que ya salió a la calle, sin estructura, pero con increíbles y ilusionantes resultados. Y la de todos aquellos que todavía no se han despertado, pese a que estan siendo ninguneados, robados y dominados en una dictadura latente, cada día, a cada titular de periódico y telediario. Este es el momento del compromiso, sin dejar los ideales, con las alianzas y coaliciones necesarias y positivas para mejorar nuestro mundo, nuestro país, ciudad, nuestra realidad. Dejar atrás la indefinición, armarse con el civismo inteligente con el que Hessel nos ilumina el camino.

Es el momento de hacer frente a los poderes fácticos como los mercados, las grandes corporaciones transnacoinales y sus políticos defensores de los intereses de unos pocos frente al interés general. Para ello es fundamental la regeneración de lo que existe a través de la decisión "realmente" democrática del pueblo. La recuperación del concepto democrático de soberanía, tan en desuso en el mundo globalizado, y que no es el fundamento del Estado, sino el instrumento de la sociedad frente al Estado: Lo creamos, lo controlamos y lo tenemos a nuestra disposición. Para ello es inevitable que se den algunos factores como una crisis de legimitidad del poder constituido, una repolitización de la sociedad, pasando por la concienciación de cual es el papel histórico y el momento en el que se vive y de cómo su participación (y activación) influirá de forma decisiva en la emancipación colectiva y en una mejora de las condiciones políticas, como previo paso para las mejoras económicas y sociales de la población. Y el conocimiento de la teoría democrática, sus condiciones, y la información necesaria sobre qué es lo que esta pasando, con la utilidad de voces autorizadas, la experiencia de procesos pasados y registrados. Ahora reflexinad y que alguién me diga si eso no está pasando ya, por ejemplo en hispanistán.

Hace un año por estas fechas escribía que este mundo es una mierda (y II) y casi nada ha cambiado, y si lo ha hecho es a peor. Pero si que ha habido un cambio. Ha habido un despertar y ese despertar aunque eminentemente juvenil, lo es de toda la sociedad, porque se ha demostrado que todas las capas sociales, ideologías, edades, situaciones, profesiones, trabajos, relaciones, personalidades estan representadas; se sienten identificadas. Es nuestro momento. El momento del compromiso por y para una sociedad mejor.

miércoles, 11 de mayo de 2011

El 15 de mayo la indignación tiene un plan


Domingo 15 de mayo, Plaza Mayor de Salamanca. Nos vemos!!!

Todo está yendo muy deprisa. En la cumbre de jefes de Estado y primeros ministros de la Unión Europea, bautizada como “Cumbre del Euro”, José Luis Rodríguez Zapatero llevó la propuesta de ligar los salarios a la productividad. Sólo un día después, el 25 de marzo, comunicaba ésta y otras políticas de recortes sociales a representantes de 44 grandes empresas y bancos españoles, en un encuentro que el periodista Ignacio Escolar comparó satíricamente con la Cámara de los Lores. Telefónica, una de las compañías invitadas, tardó apenas tres semanas en llevar a la práctica la receta de Zapatero al anunciar el 14 de abril su pretensión de que los salarios de toda su plantilla dejen de subir con los precios.

Con parecida rapidez, quienes suspiraban por una respuesta en las calles a las políticas de gestión de la crisis tienen una fecha de referencia: el 15 de mayo. Al cierre de esta edición (tres semanas antes de la cita) el evento de Democracia Real Ya contaba con 32 convocatorias en otras tantas ciudades españolas, 25 apariciones en prensa, incluidos tres de los siete diarios generalistas de tirada nacional, y más de 12.000 seguidores en Facebook.

Para quien cuestione la trascendencia de este tipo de datos, quizá valga la pena recordar que hasta el 7 de marzo no existía ningún logo ni lema común para lo que era, desde diciembre de 2010, un difuso afán de protesta expresado en torno a diferentes identidades y causas. Entre las identidades, la del ciudadano indignado y el joven sin futuro, resumidas en las etiquetas de #nolesvotes y la inicial de juventudenaccion. Entre las causas, la aprobación de la ley Sinde destapó la indignación, y a partir de ahí polémicas como la de los eurodiputados que votaron en contra de rebajar la clase de sus billetes de avión se convirtieron en difusoras de las diferentes etiquetas de la convocatoria.

Desde el bautizo de la protesta, la marca ‘democracia real ya’ se ha demostrado lo suficientemente abierta como para interactuar de manera virtuosa con esas diferentes expresiones de malestar. La irrupción de la convocatoria de Juventud Sin Futuro el 7 de abril –otra protestamarca surgida en Madrid del ámbito del asociacionismo universitario de izquierdas– significó el primer refuerzo masivo para la llamada a tomar las calles el 15 de mayo, quizá porque en los medios convencionales la protesta del 7 de abril se presentó como una iniciativa ‘vírica’ más y no como una propuesta de un grupo político ya definido. Democracia Real Ya llegó a emitir un comunicado de prensa para desvincular ambos logos, en un gesto que pasaba por alto el carácter no forzado con el que los dos convivían en el medio que los vio nacer, las redes sociales.

La calle está en la red

La gente que se iba acercando a curiosear por la octava performance del grupo Estado del Malestar, en Madrid, la tarde del viernes 15 de abril había ido plasmando sus propios malestares en el papel continuo desplegado en el suelo de la Puerta del Sol: como en un memorial de luchas algo dispares, sobre el fondo blanco se garabateaban las referencias a la estafa de PSV, la inmobiliaria vinculada a UGT, al “qué pasa que no tenemos casa” de las sentadas por la vivienda digna de 2006, y –atención– al logo del movimiento para que se amplíe el límite de velocidad.

Pedro, un informático de 43 años graba la performance de esa tarde con su cámara digital. Se enteró de Estado del Malestar por haber participado en otra convocatoria similar frente al Ayuntamiento, “en contra de los políticos”. También de la llamada a manifestarse el 15 de mayo, “contra el recorte de derechos”, dice, con el que “algunos empresarios viven a nuestra costa”. Detrás de él, una de las participantes en la performance se coloca el cartel de ministro de Injusticia para arbitrar un partido –amañado, por supuesto– entre los dos principales grupos políticos.

Poco a poco, este tipo de expresiones de hartazgo saltan de las pantallas a las calles. Frente a quienes aventuran un divorcio entre lo real y lo virtual, ejemplos como las Rumba Raves que han asaltado algunas oficinas bancarias a ritmo de flamenco, muestran que la protesta presencial contra la crisis se piensa en las redes, salta a la calle y se vuelve a volcar en la red para multiplicar su efecto.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Análisis del Estado del bienestar finlandés (y de la posibilidad de aplicarlo en España)

Finlandia dispone, para muchos, del mejor y más completo Estado del bienestar del mundo.
El sistema educativo del país ha hecho que los alumnos finlandeses alcancen el primer puesto del informe PISA año tras año y las políticas de redistribución de la renta contribuyen a que el indice de pobreza sea el tercero más bajo de las Naciones Unidas. ¿Cómo funciona el Estado del bienestar en Finlandia?

EDUCACIÓN:
  • Es obligatoria hasta los 16 años, hasta esa edad es gratuita la matriculación, los libros y la comida que se ofrece en los centros a los estudiantes.
  • Durante los tres años de instituto los alumnos pueden recibir revisiones médicas sin coste para sus familias, el resto de gastos siguen a cargo del Estado finlandés, incluido el almuerzo en los comedores, aunque a partir de este momento han de abonar los libros. A ello se une un sueldo de 246 euros mensuales por estudiar.
  • La educación a nivel universitario es gratuita, el alumno recibe 298 euros por parte del Estado cada mes como manutención y, además, un 80% del coste del alquiler para que se independice (hasta un máximo de 201'60 euros).
  • Los centros educativos disponen de un enfoque personalizado que hace hincapie en las necesidades tecnológicas del alumno y del país.
PRESTACIÓN POR DESEMPLEO:
  • En caso de que un trabajador sea despedido por su empresa aduciendo razones económicas, ésta deberá volver a contratarle cuando las susodichas cambien.
  • La prestación por desempleo en Finlandia está relacionada con el salario que se percibía antes de perder el trabajo y alcanza, en terminos medios el 85% de lo que se cobraba en caso de tratarse de una persona sin hijos, atendiendo al número de descendientes el porcentaje aumenta.
  • La prestación puede ser cobrada hasta un máximo de 500 días.
  • Es necesario cotizar 8 meses en caso de ser trabajador por cuenta ajena o un año y medio si se trata de un autónomo.
  • Pueden rechazarse ofertas de trabajo por un periodo de tres meses aduciendo razones vocacionales siempre y cuando sea presentado un título oficial que pruebe que el parado es capaz de realizar las tareas a las que aspira. Pasado ese periodo y en caso de rechazar ofertas de trabajo sin justificación adecuada se le podrá retirar la prestación.
  • La cantidad media que recibe un parado por parte de la seguridad social finlandesa en caso de haber tenido con anterioridad un empleo por el que percibía 1.500 euros mensuales es de 1.350.
FAMILIAS:
  • 180 días de baja maternal (o paternal) sufragada por el Estado vía impuestos y cotizaciones.
  • La mujer debe tomar obligatoriamente los 105 primeros días después del parto, los 75 siguientes pueden ser disfrutados por el hombre.
  • La cantidad media a percibir es de 900 euros mensuales para las madres y 1440 para los varones.
  • Uno de los progenitores puede permanecer de baja hasta que el niño alcance los tres años, la empresa no podrá despedir al trabajador, debiéndole guardar el puesto, durante este periodo el empleado percibirá entre 63'04 y 300'01 euros por parte del Estado.
SANIDAD:
  • El Estado cubre dentro de la seguridad social los gastos dentales de aquellos que coticen y de sus hijos menores.
  • Si el usuario prefiere acudir a un especialista del sector privado se le subvenciona el 42% del precio de la consulta (Normalmente a aplicar sobre 100 euros).
  • Se ha de abonar un coste fijo en caso de ser sometido a una operación quirúrgica (89'90 euros) o de ser hospitalizado (27 euros) o de requer pruebas radiográficas, análisis o escáners hasta un máximo anual de 672'70 euros a partir del cual el Estado finlandés se hará cargo del 100% de los gastos y el usuario solo realiza un pago testimonial.
  • Existen tres tipos de medicamentos subvencionados:
a) De tipo general, el comprador abona el 58% del precio
. b) Para enfermedades crónicas (como el asma) el comprador abona el 28%
c) Para enfermedades crónicas de coste elevado (como el parkinson) el comprador abona solo
un fijo de 3 euros.

PENSIONES:
  • La edad de jubilación para los supuestos generales es de 65 años.
  • Ningún finlandés retirado puede percibir menos de 685 euros mensuales.
  • La pensión media alcanza los 1.077 euros (886'40 en España)
  • El ingreso mensual proporcionado por las autoridades a los ciudadanos finlandeses con discapacidad
    promedia 891 euros.
CAUSAS POR LAS QUE EL ESTADO DEL BIENESTAR FINLANDÉS ES INAPLICABLE EN ESPAÑA:

1) Oposición de los dirigentes empresariales:

Para ofrecer un sistema de cobertura similar se requeriría un incremento de la presión fiscal a las compañías yasí como al conjunto de las rentas más altas.
En Finlandia la presión fiscal es del 55'2 % contra el 41% español.

2) Presiones de los sindicatos:

Las uniones de trabajadores no admitirían la introducción de una normativa que establece por ley la casi libertad de despido.
El sistema de blindaje español para contratos fijos con 45, 33 o 20 días de indemnización por año trabajado es inexistente en Finlandia, se sustituye por dos meses de aviso previo antes del fin de la relación contractual entre la empresa y su empleado.
La idea de partida no es facilitar el despido si no eliminar las trabas para la contratación haciendo que los empresarios no tengan que temer futuros gastos en indemnizaciones. Esta normativa es muy similar a la de otras naciones nórdicas, Dinamarca en concreto dispone del despido más barato para el empresario de toda Europa.

3) Razones estructurales:

Finlandia tiene nueve veces menos población que España, disfruta de ingentes recursos madereros, niquel y uranio, su economía arrastra únicamente un 7'3% de desempleo contra el 20'5% de España.
Por todo ello puede permitirse una política social mucho más ambiciosa.

4) Rechazo de la sociedad:

A pesar de las apariencias la renta per capita a paridad de precios en Finlandia es casi la misma que en España, 111 puntos contra 104, estableciendo como 100 la media de la Unión Europea. Si se tiene en consideración que la fiscalidad es más alta en el país nórdico los dos guarismos son de facto iguales.
El sistema sanitario finlandés cubre los gastos dentales pero introduce el copago, no es totalmente gratuito, el usuario debe sufragar un porcentaje en cada una de sus consultas médicas, pruebas o noches en el hospital hasta un máximo de 672'70 euros / año.
El sistema se ha diseñado para que no se haga un abuso de él, pero intentar introducir un modelo similar en España llevaría a una fuerte oposición social azuzada por cualquier partido que estuviese en la oposición. Se trata de un cambio inviable, blanco fácil de la demagogia. Dentro de un sistema aún inberbe, en pañales, frente a los de mayor tradición e impulso en los países norte europeos, donde no sucede lo que aquí: En España cualquier testimonio sobre marrullería, pillaje y picaresca es aplaudido e imitado, mientras que en otras latitudes es reprobado, denunciado y no menos importante castigado, tanto socialmente como de manera judicial.

Nuestra sociedad, al igual que la griega o la portuguesa, expuesta hasta hace poco a dictauras de tipo militar, eclesiástica y nobiliaria no ha conseguido todavía afianzar unas instituciones, recursos y mentalidad que castiguen estas actitudes y además se encuentra con un estado del bienestar poco arraigado y expuesto al yugo opresor y coarcitivo de los herederos de las clases privilegiadas durante los largos períodos de represión y dictadura. Como suelo decir siempre, la eterna transición defendida a capa y espada, y crucifijo, por los conservadores nos lleva a la involución. Mantenemos el mensaje de sin vencedores, ni vencidos, pero la realidad es que no sólo los muertos en las cunetas, los exiliados o represaliados no ven, y me temo que no verán, resarcidas y reparadas las deudas de justicia, moral y universal, que los traidores alzados comenzaron hace 70 años, sino que si se mantiene esa idea de no mirar hacia atrás y recuperar los valores, constitucionalidad y progreso de la II República será imposible que este país consiga consolidarse en el entorno en el que vivimos. Seguiremos siendo la sala de fiestas de Europa o en su defecto el asilo de ancianos, al que el "resto" de europeos vendrán a gastar los réditos de sistemas sociales mucho más ecuánimes, justos y evolucionados.

Luego tienen la hipocresía de llenarse la boca con el modelo "nórdico" de estado del bienestar y piden aplicar las recetas, eso sí las que les convienen a ellos, de tal o cual modelo escogidos a granel y sin contexto, pero siempre adecuadas para permitir mantener y aumentar las riquezas y los privilegios, en la lejanía robados y ahora mantenidos con vileza, avaricia y mentiras.

Por no hablar de lo imposible que resultaría en un país cuyo tejido industrial es básicamente formado por pymes ancladas en la inmovilidad y ajenas a la innovación mutar a un modelo de grandes empresas tanto manufactureras como de desarrollo I+D+i que si que tienen en la universidad un aliado tanto a la hora de la mano de obra como de la investigación.

En resumen que para lograr un estado del biniestar similar al de países nórdicos (donde todo es más caro pero en proporción cobran más) es necesario una serie de cambios sociales y económicos que la sociedad española del "pájaro en mano" y la "pillería" no verían con buenos ojos o incluso mirarían como evadirlos en caso de llegar a ser instaurados.

¡Así nos seguirá yendo!

jueves, 2 de octubre de 2008

¿Ley de calidad? Adultos de calidad


Todos hemos cogido alguna vez el cuaderno de ciencias por la mañana. Hemos terminado la noche anterior nuestros deberes de matemáticas. Hemos dibujado mapas y leído novelas que cambiaron nuestro mundo. Si ha habido una gran conquista social en el siglo XX ha sido que a ninguno nos resulte ajena la escuela.

En medio del reto de asimilar aún este hecho, se nos abre otro de dimensiones importantes: educar a los que vienen detrás de nosotros para un siglo hecho de vértigo e incertidumbre. Genética, paz, sociedad del conocimiento, ecología, los 11 de septiembre y de marzo... son parte del menú sobre el que tenemos que encontrar respuestas para ellos y con ellos. La complejidad de este mundo, lleno de posibilidades y curiosidades, tan ajeno y tan lento aún para lo justo y lo digno, necesita una nueva generación de seres humanos con una educación intelectual, sentimental y estética tan flexible y abierta que la llama la atención la pobreza y el sectarismo desde el que se discute sobre su educación.

Si algo duele de unas alas, es que no sirvan más que para levantar un palmo del suelo. Sin altura, sin vuelo, no hay perspectiva, no hay reto ni sueño. Ahora que queda en suspenso la Ley de Calidad de la Educación, conviene recordar que la educación, a la escuela, como la mayoría de las cosas importantes no basta con una ley. No la resuelven decretos, programaciones ni competencias. Cada uno de estos trámites legislativos no debiera ser nunca el inicio, sino la apuesta por un proyecto con el que los adultos de un tiempo histórico se comprometen para hacer posible un futuro mejor.

Cuando el lugar en el que educamos a nuestros niños y adolescentes es una escuela de calidad –que no es igual que una escuela que aplica una Ley de Calidad- sus resultados se hacen presentes en lo cotidiano. En la escucha y el análisis, en la curiosidad y el gusto por la belleza. En elegir como ciudadano la esperanza, la libertad y el pensamiento (auto) crítico como los gestos que resumen el aprendizaje básico que nos enseña a vivir y a hacer buena la vida.

Una escuela de calidad, una sociedad de calidad en la que merezca la pena vivir, sólo es posible con adultos de calidad que ejerzan (sin esconderse) desde el ámbito o desde el papel social que les corresponda. Adultos que por su forma de vivir convezcan, contagien a niños y a adolescentes (y a otros adultos también) de que hay una manera de relacionarse con la vida y con uno mismo que merece la pena aprender, por la que vale la pena esforzarse.

La escuela es un proyecto exigente que, al desarrollarlo, nos obliga a todos a mirarnos. A ser capaces de respondernos de vez en cuando: ¿qué hemos aprendido?, ¿qué merece la pena aprenderse?, ¿cuál es la mejor manera de hacerlo?, ¿cuánto creemos que deben aprender los que nos siguen?, ¿cuánto estamos dispuestos a aprender aún nosotros?

Por eso, para hablar de educación, antes de mirar hacia las programaciones, religión sí o no, itinerarios o reválidas, los niños merecen que los adultos nos paremos a pensar qué proyecto de mundo tenemos y con qué actitudes y compromisos estamos dispuestos a protagonizarlo. No hay proyecto educativo que triunfe sin unos adultos con los que niños y adolescentes aprendan a arriesgar, a buscar, imaginar, a comprometerse al verles en los respectivos papeles que desempeñan socialmente:

1. Como profesores, adultos de calidad cuyo empeño esté en que sus alumnos recuerden, a través de su trabajo y su persona, el colegio o el instituto como un lugar de referencia vital y cultural. Espacios de creatividad y iniciativa. Profesionales del conocimiento y de las emociones, a los que la calidad de su trabajo individual y de equipo les hace ser reconocidos socialmente.

2.
Como padres, adultos de calidad cuyo compromiso mayor no sea contentar, cubrir las necesidades o evitar los problemas. Que exijan el derecho de tener tiempo para discutir, ayudar, compartir, aburrirse con sus hijos. Capaces de aunar afecto, exigencia y libertad.

3. Como profesionales, adultos de calidad a los que les importa qué se hace en las escuelas porque de las actitudes individuales y de equipo, de la capacidad de análisis y creatividad que desarrollen, dependerá la calidad de un trabajo del que nos beneficiaremos todo el día de mañana.

4.
Que en Internet y televisión, estén presentes adultos de calidad conscientes de los ojos que las miran. Ojos inteligentes e ingenuos que merecen algo más que emociones, vulgaridad o el todo vale.

5.
Como ciudadanos, adultos de calidad orgullosos y satisfechos por el esfuerzo de haber transmitido, a quienes tenemos la responsabilidad de educar, el deber de transformar (y no sólo mostrar o criticar) todas aquellas realidades que empobrecen la convivencia ciudadana.

No podemos seguir perpetuándonos en el error de pensar que la calidad de la enseñanza depende de la creación continua de nuevas estructuras, nuevas leyes. Que los buenos resultados se escriben exclusivamente dentro de las aulas. Y es que detrás de los gestos que hoy nos dibujan como adultos, dentro de nuestras ideas, de la forma en que expresamos los sentimientos, están todos los nombres, los lugares, que nos han construido desde que hemos sido niños. Somos el resultado de un viaje hecho de personas. El viaje que nos ha educado. Dibujar el mapa que hará crecer a los niños y adolescentes del futuro es una tarea responsable, dedicada, llena de imaginación y rigor, de placer y esfuerzo. De adultos hechos de compromiso y esperanza. Adultos de calidad. Si hablar de educación sigue sin implicar eso, todo lo que hagamos estará destinado sólo a este ahora y no al futuro. Y nacerá muerto.

¿Por qué no atrevernos, por qué no arriesgar y sorprender a nuestros alumnos, a nuestros hijos, a los niños y adolescentes con los que nos cruzamos todos los días? Sorprenderles por la imaginación, por placer, por curiosidad y compromiso. Por pasión por la vida y lo humano. Y hacerlo ya, porque como afirma Caballero Bonald, somos el tiempo que nos resta.

sábado, 16 de febrero de 2008

50 ideas sencillas para salvar el planeta


Plantar un árbol, no arranque el coche hoy, cambie una bombilla. Piense un poco antes de comprar. El ciudadano tiene más poder del que cree para que gobiernos y empresas den un giro

Wangari Maathai, Nobel de la Paz en 2004: “No son las cosas grandes las que marcarán la diferencia, sino más bien los pequeños pasos que demos cada uno cada día”. Es nuestra apuesta en esta nueva andadura. Cambiemos el rumbo. Está a nuestro alcance. Cada uno de nosotros, cada lector, cada periodista tiene en su mano más poder del que imagina. Con sus pequeñas decisiones diarias –qué compra, dónde, cómo va a trabajar, cómo es su casa, a quién vota, dónde ahorra, qué come…- puede lograr que el planeta se recomponga. Seguramente haya escuchado (probablemente también lo haya pensado): “¿Para qué cambiar nuestros pequeños hábitos de consumo, si quienes realmente ostentan el poder siguen comportándose igual?”. Nos minusvaloramos. Si nosotros exigimos otros productos, otras actitudes, Gobiernos y empresas deberán adoptar otros registros. Confianza y optimismo. Otro Nobel de la Paz, Martin Luther King: “Si supiera que el mundo se ha de acabar mañana, yo hoy aún plantaría un árbol”. No se piden grandes esfuerzos, ni siquiera renunciar a la comodidad. La misma recomendación sirve para las compras que para nuestra vida: rechace el exceso de envoltorios, el empaquetado superfluo; lo único que hace es complicar nuestra bolsa de basura. E.F. Schumacher, economista: “Debemos vivir con sencillez para que otros, sencillamente, puedan vivir”.

1. Otras bombillas

Cambie las bombillas incandescentes por otras de bajo consumo. Son más caras, pero duran hasta 10 veces más, y gastan entre cuatro y cinco veces menos. Éste era el primer consejo de la campaña de promoción de la película Una verdad incómoda, de Al Gore. El Gobierno australiano obligó a comienzos de año a acometer este cambio en todo el país, toda una revolución de bombillas. En España, cada hogar es responsable de producir hasta 5 toneladas anuales de CO2, principal causante del efecto invernadero. Tenemos que disminuir el consumo de energía. Nuestro comportamiento es decisivo para frenar el cambio climático, que, según los expertos, provocará este siglo un aumento de las temperaturas medias de 2 a 4 grados, una subida de las aguas de los mares de 28 a 43 centímetros y la extinción del 20% de las especies.

2. Demasiada basura

Las bolsas de basura de nuestras casas no paran de engordar. Otro síntoma más de la sociedad de consumo. En 1990, un español generaba una media de 323 kilos de residuos domésticos al año; en 2004, esta cantidad había aumentado a 524 kilos, según el Observatorio de la Sostenibilidad en España. Recuerde la triple regla de oro para gestionar bien los residuos: REDUCIR, REUTILIZAR Y RECICLAR. La sociedad avanza en el reciclaje, pero no en las dos primeras opciones. Del cerca del kilo y medio de residuos que generamos cada uno al día en casa, casi medio kilo corresponde a envases y envoltorios. Estos materiales son muy voluminosos, y a menudo también superfluos e incluso complicados de reciclar. Debemos evitar comprar productos con exceso de embalaje. Si seguimos esta sencilla regla, nuestras bolsas de basura habrán solucionado buena parte de su sobrepeso.

3. El sol en casa

Las energías renovables se están implantando rápidamente. Los paisajes se han llegando de aerogeneradores (en algunas zonas hasta en exceso, con un impacto visual y auditivo sin calibrar). En poco tiempo se instalarán también en plataformas marinas. Y, según las nuevas normas de edificación, toda vivienda de nueva construcción debe incorporar unas superficies mínimas de colectores solares. Además, existen subvenciones para instalar placas fotovoltaicas; las compañías eléctricas están obligadas a comprar la energía que se genera con ellas a un precio con incentivo. A pesar de ser un país privilegiado en este sentido, a pesar del extraordinario potencial de sol con que contamos. España está muy por detrás en instalación de paneles solares en casas respecto a otros países, como Alemania y Austria, que soportan muchos más días nublados.

4. Un jersey y un toldo

Si tiene calefacción individualizada, instale un termostato para controlar el gasto. Antes de subir la temperatura o recurrir al aire acondicionado, probemos otros opciones que no requieran energía, como ponerse un jersey en invierno o generar corrientes cruzadas de aire en verano. Echemos mano también de toldos, persianas y ventiladores en época de calor. Y vigilemos a qué hora ventilamos las estancias. Si al final no son suficientes estas medidas, al menos habremos reducido las necesidades de calor o frío de la situación inicial. Recuerde, además, que las mejoras en el aislamiento de la vivienda permiten obtener ahorros energéticos y económicos de hasta un 30% en calefacción y aire acondicionado.

5. Desechos tecnológicos

Cuidado con la basura tecnológica; los aparatos electrónicos contienen sustancias peligrosas. Una batería de cadmio del móvil puede contaminar 600.000 litros de agua. No tire estos residuos ala basura. Llévelos a un punto limpio. Y piense dos veces antes de cambiar de aparato. Para fabricar un ordenador se han necesitado 240 kilos de combustibles fósiles, 22 kilos de productos químicos y 1500 litros de agua. Fabricar un teléfono supone generar hasta 75 kilos de residuos contaminantes, aunque luego nos vendan como un gran adelanto su pequeño tamaño.

6. Grifos en buen estado

Ojo con el agua. Revise todos los grifos de la casa. Que no goteen. Una forma de reducir el consumo es colocar difusores de caudal.

7. Vigile las facturas

Compruebe cada mes las facturas de agua y energía para llevar el control del consumo. Es más, propóngase bajarlo. Márquese un reto, un objetivo. Si lo logra, doble satisfacción.

8. Al mercadillo

Compremos muebles duraderos. Esto no quiere decir que tengan que ser nuevos, también podemos reciclar alguno o acudir a tiendas de segunda mano.

9. Gota a gota

Si tiene jardín, instale riego por goteo. Elabore su propio abono (compost) con los restos orgánicos. Y cuide mucho el uso de plaguicidas y fertilizantes químicos.

10. Cartas sin papel

Pidamos que las facturas y extractos mensuales lleguen a nuestro correo electrónico en lugar de al buzón de cartas de casa. Menos papel que tirar.

11. Conducir menos

La regla más importante para hacer más habitable nuestro entorno urbano: conducir menos. El transporte público en España consume 6 veces menos energía, por cada viajero, que el privado, según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE). Los coches consumen ahora un 20% menos que hace 20 años, pero aún así, el transporte es responsable en España de un tercio de las emisiones de CO2. Los datos cantan: está comprobado que uno de cada 10 viajes que se realizan en coche en la ciudad es para moverse menos de 500 metros, una distancia que prácticamente todos podemos cubrir saludablemente caminando. Si fuéramos a pie en todos los desplazamientos de menos de 10 kilómetros, podríamos ahorrar a España casi 1.000 millones de litros de combustible al año.

12. Eco-coches

Si nuestra única opción es el coche, busquemos uno que consuma lo menos posible. Pensemos en las opciones de modelos híbridos. O en echar al depósito biocarburante. En www.idae.es podemos encontrar una base de datos con el consumo de cada modelo. No olvidar que los vehículos más grandes gastan más que los pequeños. Y buena parte de su consumo dependerá también de la persona que esté al volante. Una conducción eficiente puede reducir el gasto de combustible y la emisión de CO2, un 15%. Primera regla: una velocidad moderada y constante.

13. Ciudad mediterránea

Si está buscando casa para alquilar o comprar, baraje seriamente la posibilidad de vivir en el núcleo de la ciudad, preferentemente en un edificio antiguo rehabilitado. No dejemos morir el modelo de ciudad mediterránea, compacto, tan humano, y lo cambiemos por el de urbe extendida, desperdigada, al estilo de las norteamericanas, una sucesión de urbanizaciones en las que resulta difícil establecer relaciones entre vecinos y que nos obligan a depender del vehículo privado.

14. Más zonas verdes

Reclamemos zonas verdes, pequeños pulmones para nuestra ciudad. Cumplen una importante función psicológica. Está probado que en barrios con zonas de esparcimiento verde, los niveles de conflictividad, estrés y depresión de sus vecinos disminuyen. Son una válvula de descongestión. Y exijamos que no se pierda la tradición del jardín árabe. En vez del uso de césped a diestro y siniestro –costumbre heredada de los húmedos países anglosajones-, pidamos plantas autóctonas, que requieren menos riego y más imaginación.

15. Menos ruidosos

Un poco de silencio, por favor. Cuidar el medio ambiente no es sólo por la salud del planeta, sino también por la nuestra, por el equilibrio de todos los seres que habitamos la Tierra. Por eso debemos evitar que nuestro comportamiento en la ciudad sea muy ruidoso. Según la OCDE, el 20% de los habitantes de la UE sufren un nivel de ruido por encima del límite establecido por la OMS como aceptable: 65 decibelios. La contaminación acústica deteriora la calidad de vida de una ciudad y tiene además efectos directos sobre la salud: los más claros: nerviosismo, irritabilidad y estrés. Según el Observatorio de la Sostenibilidad en España, el 35% de las quejas por ruido proceden de locales de ocio.

16. Ocio sin consumo

Elija un ocio menos consumista. No deje que la obsesión por comprar le condicione y se convierta en el protagonista de su tiempo libre.

17. Más bicicletas

Muévase en bicicleta, si la orografía, clima y tráfico de su ciudad lo permiten. Y si ve que no es seguro desplazarse sobre dos ruedas, exija a su Ayuntamiento carriles bici.

18. Escapes

Avise a averías de los servicios municipales en cuanto detecte un escape de agua en la red de distribución.

19. El brillo de las estrellas

Pida a su Ayuntamiento que la iluminación de las calles sea eficiente y de bajo consumo, que no despilfarre luz hacia el cielo, que, además, contamina las estrellas.

20. Más participativos

El 80% de la población europea y el 60% de la mundial vive en ciudades. El ritmo de concentración urbana continúa a un ritmo cada vez más acelerado. No adopte una actitud pasiva. Movilícese. La ciudad la hacemos entre todos. Participe en movimientos y plataformas vecinales, y tenga en cuenta los compromisos ambientales de verdad cuando vote.

21. La bolsa o la vida

Cuando vayamos a la compra, no olvidemos llevar nuestra propia bolsa, cesta o carrito. Las bolsas de plástico suponen un coste ambiental demasiado elevado para utilizarse en un único trayecto del mercado a casa. Pueden tardar cientos de años en descomponerse; en sus poco más de 25 años de historia se han convertido en una plaga. La web www.reusablebags.com asegura que cada minuto se fabrica en el mundo cerca de un millón de bolsas de plástico. En España se estima que se reparten al año 10.500 millones de estas bolsas, lo que equivale a más de 230 por persona. Ahorre el planeta sus 230 usando la cabeza. También puede pedir a su establecimiento habitual que faciliten otro tipo de bolsas reutilizables.

22. Apueste por lo biológico

Apúntese a los alimentos ecológicos, también denominados biológicos o bio. Provienen de una agricultura y ganadería extensivas que no usan productos químicos sintéticos para aumentar su rendimiento o para luchar contra las plagas. España es uno de los mayores productores de alimentos biológicos, pero la gran mayoría de lo obtenido se dedica a la exportación. ¿Es que no sabemos apreciarlo nosotros? Apoya el esfuerzo de estos agricultores y ganaderos que han decidido cambiar por el medio ambiente.

23. El vidrio se recicla bien

¿Vidrio, tetabrik, plástico o lata de aluminio? ¿Cuál escoger cuando un mismo producto se puede encontrar en diferentes envases? “Lo mejor es el cristal”, opina Juan López de Uralde, director de Greenpeace España, que asegura que no sale a la compra sin su cesta o su bolsa de tela. ¿Y después del vidrio? Según dice, el plástico que no sea PVC y la lata resultan más fáciles de reciclar que el tetabrik. “De todas formas, ante la duda, yo cojo el que ofrezca menos envase por más contenido”.

24. Un respeto a los peces

En la pescadería debemos leer la etiqueta identificativa de cada pescado. En ella ha de figurar el tipo de aparejo utilizado en su pesca. Cuanto más selectivo, más sostenible (mejor anzuelos o palangres que con redes). Y recuerde: “Pezqueñines, no”. La talla mínima debe ser de 11 centímetros. Y la del boquerón, de 9 en el caladero mediterráneo y 12 en el cantábrico, noroeste y golfo de Cádiz. Podemos consultar las tallas mínimas en la web del Ministerio de Agricultura.

25. Menos carnívoros

Para producir un kilo de trigo se necesitan 1.000 litros de agua, y para un kilo de arroz 1.400 litros, según el Consejo Mundial del Agua. En cambio, para un kilo de ternera se requieren 13.000 litros. ¡Vaya con la carne! Reduzcamos su consumo. No hace falta comer tanta; con dos o tres raciones semanales es suficiente. Con la comida, pensemos ante todo en la salud. También suele ser lo más ecológico. Hagamos caso a los expertos en nutrición y sigamos una dieta equilibrada con mucha fruta y verdura.

26. Cercanías

Compre productos locales, ya que para llegar hasta el mostrador del mercado han requerido menores desplazamientos y, por tanto, menos gasto energético.

27. Agua del grifo

Piense bien si merece la pena comprar agua embotellada cuando se puede beber la del grifo. Incrementa el gasto en energía y creará un futuro residuo.

28. Sin bandeja

Compre alimentos naturales a granel siempre que sea posible. Reducirá envoltorios y ganará calidad. Evite llevarse a casa esas bandejas blancas cada vez más habituales en el súper.

29. Alerta: transgénicos

Uno de los enemigos número uno de los ecologistas son los transgénicos. Recomiendan no consumirlos porque, dicen, todavía faltan pruebas que demuestren su inocuidad para la salud y el medio ambiente. Su presencia debe ir notificada en la etiqueta del producto.

30. El pequeño comercio

Evitemos ir en coche a un establecimiento lejano si podemos realizar la compra caminando sin salir del barrio. Apoye el pequeño comercio, salva el modelo mediterráneo de ciudad.

31. Más sobriedad

Apueste por la vida simple, consuma menos, piense más. El economista E.F. Schumacher terminó sus días como agricultor y escribió el libro-filosofía Lo pequeño es bello. Toda una filosofía de vida. Según el Informe Europeo sobre Adicción al Consumo, el 15% de la población es adicta al consumo y un 46% de la juventud compra en exceso. Pensemos un poco: los países desarrollados (un 20% de la población), emplean el 80% de los recursos naturales. Si todos los habitantes del planeta consumieran a ese ritmo, la Tierra quedaría agotada en poco tiempo. Antes de comprar una nueva prenda, un nuevo aparato, piense si realmente es necesario. Detrás de cada objeto, por simple que sea, hay un consumo de energía, una generación de residuos. Un gasto de agua.

32. Piense en lo que tira

El escritor mexicano y premio Nobel Octavio Paz se mostraba muy crítico: “Después de haber caído en la idolatría de los sistemas ideológicos, el siglo XX ha terminado en la adoración de las cosas”. Antes de comprar, reutilice. Un poco de imaginación y podemos ahorrarle muchos disgusto a la Tierra (y al bolsillo). Un cartón de huevos puede reciclarse como un juguete para los niños; una botella bonita de vidrio, de pequeño jarrón; los calcetines se pueden convertir en muñecos; con restos de telas se pueden hacer colchas o mantas para el sofá. Hay cientos de ideas. Y no queda cutre; todo lo contrario, le da un punto original a nuestra casa, una decoración comprometida con el planeta.

33. Límites a la “fast fashion”

Somos muy críticos con la fast food; pues lo mismo debemos hacer con la fast-fashion (moda rápida), prendas de usar y tirar que apenas duran una temporada. Eso, desde el punto de vista ecológico, resulta una aberración. Déles una segunda oportunidad a las cosas. Acuda a comercios donde se vende ropa de segunda mano. Ayude a que todos estos objetos tengan una nueva vida frente al impulso despilfarrador de acortar cada vez más su vida con lemas como “está pasado de moda” o “redecora tu vida”.

34. Más madera sostenible

La madera es un producto muy ecológico, pero cuando lleva el nombre exótico de alguna especie tropical puede haber salido de la deforestación de las últimas selvas vírgenes del planeta. Para estar seguros de que el producto que queremos comprar procede de una explotación sostenible, lo mejor es pedir madera certificada con el sello FSC (Forest Stewardship Council). Si exigimos esta distinción en todas las tiendas, ayudaremos a que se vaya generalizando. Ya son 60 las empresas españolas que venden FSC.

35. Comercio Justo

Cuando compra algo, ¿piensa de dónde viene? Granito de arena a granito de arena, de pequeña decisión a la pequeña decisión, el consumidor puede influir mucho en lo que se produce y cómo se produce. Hemos de tomar conciencia de que nuestras acciones, por insignificantes que nos parezcan, tienen consecuencias ambientales sociales y económicas. Una recomendación: acudir a las tiendas de comercio justo que han abierto diversas ONG. Hay cientos, con el aval de asociaciones como Intermón-Oxfam.

36. Papel reciclado

En la papelería, compre productos (carpetas, libretas, cuadernos, folios) elaborados con papel reciclado y sin blanquear por cloro.

37. Bancos con iniciativa

A la hora de ahorrar, acuda a aquellos bancos que sepa que invierten una parte de sus beneficios en promover iniciativas sociales o medioambientales, como Triodos Bank.

38. La dignidad del trabajo

Ayude a mantener lo hecho con calidad y dignidad. Evite las producciones industriales masivas en fábricas de países donde no tengan claro el respeto a los trabajadores.

39. Juguetes y tiempo

No sature a los niños regalándoles juguetes que no van a apreciar. Valoran más otras cosas: que los mayores les dediquen más tiempo o les enseñen a fabricarse sus propios entretenimientos usando la imaginación.

40. Infórmese

Lea prensa, siga la actualidad, interésese por el mundo. Un consumidor informado es un consumidor responsable. Así sabrá qué empresas son más sostenibles.

41. Un habitante, una semilla

En el siglo XX, los 5.000 millones de hectáreas cubiertas de bosques se redujeron a menos de 4.000 millones, según el Banco Mundial. Plante un árbol. Y mejor de una especie autóctona. Aparte de la satisfacción de asistir a su crecimiento y mejorar el paisaje en un país con tanta tendencia a la desertificación como España, hay un dato fundamental para frenar el cambio climático: por término medio, un solo árbol absorbe una tonelada de dióxido de carbono a lo largo de su vida.

42. Cuidado con el fuego

Muy importante evitar los incendios forestales. En la última década, la media de superficie forestal calcinada en España ha sido de 118.000 hectáreas por año. En el 73% de los fuegos influye –por intención, imprudencia o negligencia- la mano humana. Debemos ser muy cuidadosos en nuestras estancias en el campo: no encienda fuego en el campo, ni para quemar rastrojos ni pastos, ni para barbacoas o fogatas. En la época de alto riesgo, meses de verano, y especialmente si hay sequía, mejor no hacerlo ni en los sitios habilitados para ello; cualquier chispa puede acabar en desastre. No arroje al suelo cerillas ni colillas, ni ningún objeto de combustión, ni papeles, plásticos, vidrios o cualquier otro residuo susceptible de entrar en combustión y originar un fuego.

43. Sin motores

Por las zonas rurales y los parajes naturales intente usar lo menos posible los vehículos de motor, que rompen la calma que tanto nos gusta, ahuyentan a los animales, trastornan la tranquilidad de los habitantes de los pueblos y, en los caminos forestales, erosionan gravemente el suelo. Circular con el todo-terreno por todos los rincones es más hortera y depredador que aventurero; lo mismo sucede con los quad, desgraciadamente tan de moda. Infinitamente mejor es ir en bici, a caballo, en burro o andando.

44. Mejor rehabilitar

Si busca una casa en el campo, es mejor que elija la rehabilitación de una antigua edificación de pueblo que las nuevas construcciones de urbanizaciones. Es posible que sea más engorroso y quizá hasta más caro, pero la opción de la casa típica tiene más encanto, al final la haremos más nuestra, y evitaremos los desarrollos urbanísticos indefinidos que tanto están agrediendo a nuestros paisajes. Esto mismo se puede aplicar a las costas. Es mejor optar por lo ya construido que invadir más zonas naturales.

45. Denuncie las tropelías

Denuncie al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) (062), muy activo y eficaz, los atentados que contemple contra el medio natural: desde alguna instalación que está contaminando un río o un arroyo hasta la quema de rastrojos o neumáticos, o vertederos incontrolados, o el uso de venenos, que siguen haciendo estragos en el campo español, y alambradas ilegales. Denuncie también todos aquellos proyectos urbanísticos ilegales que sólo buscan el enriquecimiento rápido de unos pocos a costa de maltratar el paisaje natural. No se instale en la comodidad mirando hacia otro lado.

46. Menos exploradores

Respete las normas de cada espacio natural en todo lo relativo a zonas de acampada y de escalada. Muévase por estos espacios sin salirse de las rutas habilitadas.

47. De pueblo en pueblo

El turismo rural es una magnífica manera de contribuir a las modestas economías de la gente que vive en el campo y de ayudar a fijar población en los pueblos pequeños.

48. El “souvenir”

Una forma maravillosa de contactar con la naturaleza y encariñarse con ella es fotografiarla. Una afición entretenida y mucho menos impactante que meter ruido con un quad.

49. Cuestión de setas

A la hora de recoger setas, no hay que arrancarlas, sino cortarlas con una navaja por el tronco. Además, lleve una cesta en lugar de una bolsa de plástico para dejar que las esporas vayan desperdigándose.

50. El lenguaje natural

El mundo natural es un libro que hay que saber leer. Podemos dotarnos de guías que nos enseñen los nombres de aves, árboles, plantas, insectos, fenómenos geológicos…

Calcular la huella ecológica: www.earthday.net

Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía: www.idae.es

Fundación Ecología y Desarrollo: www.acodes.com

Información en Internet: www.worldwatch.org, www.energías-renovables.com, www.gea21.com, www.climatenetwork.org y www.istas.ccoo.es

Dos direcciones: www.vidasana.org (agricultura ecológica) y www.greenpeace.org. Un documental: La pesadilla de Darwin, de Hubert Sauper.

Para saber más: www.e-comerciojusto.org, www.wwf.es, www.fsc-spain.org, www.buencafe.org y www.ropalimpia.org.

Un libro: “La tierra herida”, de Miguel Delibes Castro y Miguel Delibes (Destino). Más www.seo.org, www.redmontanas.org, www.mma.es.

Camareros: Necesarios, degradados y precarios. Una experiencia personal

Ahora que ya está aquí el veranito con su calor plomizo, pegajoso y hasta criminal, se llenan las terracitas para tomar unas...