miércoles, 19 de mayo de 2010

El caso Gurtel no sirve de nada



Todos conocéis de sobra los casos de corrupción que afectan al PP y que apuntan a lo más alto: ex ministros de Aznar (como Jaume Matas), el ex tesorero del PP (Luis Bárcenas), alcaldes, concejales, consejeros de comunidades autónomas, diputados nacionales... Además hay otros sospechosos de peso implicados en otras tramas (Fabra, Camps…) y numerosos dirigentes del PP y altos cargos políticos que han dimitido...

Pues bien, me atrevo a decir que nada de esto pasará factura electoral al PP. Llevamos meses conociendo detalles de la corrupción en el PP y los sondeos del CIS siguen otorgando a este partido ventaja sobre el PSOE.

No valen de nada los grandes titulares de los periódicos, ni las grabaciones que airean las radios. No sirven las gargantas profundas, ni las inmersiones en decenas de miles de páginas de sumarios. Todo es inútil.

Una masa compacta de votantes volverá a elegir al PP. Es difícil arriesgar opiniones sobre los mecanismos psicológicos que mueven a cada ciudadano a la hora de votar, pero en España se estila mucho el voto irreflexivo, tradicional, familiar.

Muchas familias votan siempre a lo mismo, por tradición, igual que están abonados a un número de la Lotería de Navidad. Da igual que no salga nunca, es su número. Por lo mismo, da igual si su partido es corrupto, o si no da la talla: es su partido.

Esto pasa tanto en las filas de la izquierda como en las de la derecha. Pero tengo el convencimiento de que en la izquierda la autocrítica es mayor. Lo demuestran varios hechos: en primer lugar hay más partidos de izquierda a escala nacional, en segundo lugar, el PSOE sólo gana elecciones si moviliza a un electorado que está a su izquierda y que es hipercrítico. El PP gana cuando el PSOE no moviliza a ese electorado extra. El PP no moviliza a más gente: moviliza prácticamente siempre a la misma.

Por supuesto habrá muchos votantes del PP que sí sean autocríticos y que castiguen a su formación. Me temo que son minoría.

Hechas estas salvedades, en general el votante de derechas vota “a lo que Dios manda, a lo que tiene que ser”, y punto. Así que no es de esperar que las revelaciones sobre la corrupción en el PP desgasten mínimamente a Rajoy. El PP podría incluso implosionar y llegar sin candidato a las puertas de las elecciones. Con designar a uno en el último momento, ése sacaría nueve millones de votos, si no más.

Por eso Rajoy no hará nada. Sabe que sus votantes son inmunes a todo. Él sólo tiene que esperar y dejar que el PSOE se descalabre. La pasividad es su única (y mejor) estrategia.

Está claro que políticamente este planteamiento aunque no se deba, se hace. El que sea o no, moral, amoral o inmoral es otro tema que o cabe en las mentes de los de la Calle Génova. Tal es su ansía de entrar en La Moncloa, les importa poco sus incongruencias que le llevan a desdecirse cada día, de lo dicho en el anterior. Hemos aguantado hasta la saciedad ruedas de prensa de la derecha pidiendo el paro del déficit público, ordenando al presidente a seguir sus ideas e ideales y castigar, con retórica eso sí, a las clases medias y bajas de los desplantes, corruptelas y acciones especulativas que han volado los mercados y nos han dejado a casi todos con sólo lo puesto.

Tampoco les importa la persistencia del sistema democrático. Afirmo y aseguro que no han oído hablar de la separación de poderes, la independencia de la Justicia o la existencia de los valores morales y democráticos que deberían persistir siempre, pase lo que pase. Esos valores de responsabilidad, profesionalidad política, ética o justicia naufragan ante el continúo desprecio del sistema y las teorías conspiratorias siempre vocíferadas por sus altavoces habituales.

Da igual lo que suceda en la acera contraria del bipartidismo. Es evidente que los casos de corrupción salpican a todos, porque por desgracia, la sinverguencería y la corrupción parecen sustanciales al cargo público desenpeñado. Pero la crítica ya no es a la corrupción en si misma, sino a la doble moral, que la derecha emplea para desvirtuar sus "problemillas" y maximizar los del rival, aunque unos y otros con sus acciones se delatan. No debería de haber una protección al presunto corrupto y la salud democrática debería implicar medidas cortantes: Cese o destitución (lo que los curritos llamamos despido) al presunto implicado, por parte de la dirección del partido y bloqueo de todas las cuentas y bienes de la familia del todavía supuesto corrupto. Y por supuesto una vez probada la acusación, mediante sentencia judicial, promover no sólo a las penas carcelarias, sino también la expropiación de todos sus bienes, y los de su familia tanto política como de sangre hasta la segunda línea. A modo de aviso-barra-escarmiento.

No estaría mal, pero el bipartidismo alienta todo lo contrario y así es imposible avanzar, a menos que seamos la ciudadanía los que volvamos a coger las riendas de las decisiones y las reglas del juego con las que tenemos que convivir Todo para evitar no sólo la corrupción, sino también y no menos importante los agravios comparativos o el despilfarro de instituciones muchas veces mal gestionadas y otras veces inútiles ante un sistema político y una estructura chapucera, autocomplaciente y que premeditadamente dispuso y dispone de los medios y actuaciones necesarios para escapar de la censura y control ciudadano.

lunes, 17 de mayo de 2010

D.E.P. Ronnie James Dio



Homenaje y agradecimiento de un heavy a Ronnie James Dio, fallecido en el día de ayer debido a un cáncer de estómago.

Subimos al pajaro ardiente que surca los mares en busca de las melodias del maligno. los acordes de la rabia, las sinfonias del desahogo y el pentagrama de la emocion. Planeamos por la oscuridad de la noche, con los ojos puestos en el horizonte, la llama viva del metal que arde en el monte del destino. Tornamos en el espejo la voluntad del diablo y alzamos los puños al cielo enfundados en plata y cuero. Son señales de desafío respondido con los truenos de oídos necios y cobardes en la espiral del destino de noches emblemáticas que ya sólo se alojarán en la memoria y jamás serán recordadas. La luz será fuerte e intensa en la inmensa oscuridad, los primeros gritos y acordes socavarán tu entierro, buscando imitar la voz del desaparecido del padre y señor del metal. Y así cada vez la espada y el guante de ácero serán todo uno y cortarán el yermo de tu olvido, porque prohibido queda olvidar a alguno de los legendarios, porque serán historia y serán leyenda eterna, recordada en el vacío de sus melodías. El recuerdo del elfo mago no conocerá el fin de las noches, pues será el acompañante del guerrero en su búsqueda del paraíso, en la conquista de victorias y los placeres de las virgenes y en las orgías del alcohol. Y allí en esa negra colina de acordes malignos cada noche, en la soledad de una habitación, en el habitáculo de un dispositivo del diablo, en los bares de barras y jarras, o donde cabalgue un caballero negro sobre su corcel, sabremos que sigues vivo en tú música, en el recuerdo de un inigualable timbre e intensidad vocal, en letras de emociones desorbitadas, en el gesto que nos une en cada velada del metal... Las voces se aunarán y por siempre Dio resucitará!!!

Zapatero es tonto del culo


No soy economista, que esto vaya por delante, pero tengo la ligera sospecha de lo que pasa cuando pides que la gente gaste para superar la crisis y, al mismo tiempo, recortas sueldos, congelas pensiones y subes el IVA. Mira tú que a lo mejor (a lo mejor, eh) la cosa no se supera y nos pegamos una hostia de campeonato. Es lo que nos dice el sentido común. Pero hay que hacer caso a nuestros líderes, ya que ellos sí saben cómo resolver los problemas. Ellos y los afamados expertos decían que la burbuja inmobiliaria iba a reventar y, en cambio... Oh, wait!

Luego dirán que no podían saber que la cosa iría mal. Que es más o menos como arrojar una bomba nuclear en medio de una metrópolis y sorprenderse de que cause millones de muertos. “¡Pensaba que la explosión iba a ser la solución a nuestros problemas! ¿Cómo podía imaginar que mataría a la gente?” Ser ZP tiene una ventaja, eso sí: seguro que él nunca se imagina el final de las pelis, por previsibles que sean. Incluso la comedia más tonta de Jennifer Aniston, en la que los dos protagonistas acaban juntos (cosa que se ve venir desde que alguien en Hollywood dice “¡vamos a hacer una comedia con Jennnifer Aniston!”) debe de ser emocionantísima para nuestro presidente, incapaz de prever absolutamente nada de lo que ocurrirá. Un don práctico para el espectador de cine que desea ser sorprendido, pero bastante jodido cuando pretendes dirigir un país.

Y Zapatero es tonto del culo, además de por todo esto, porque le está regalando la presidencia a Rajoy. No sólo se la ha puesto en bandeja de plata, además le ha colocado un lacito y se la ha ido a entregar a la puerta de su casa con orquesta de 32 músicos tocando de fondo incluida (ya que vas...). Y son muchos en estos momentos los que piensan que el PP velaría mucho más por sus intereses. Y están en lo cierto... siempre y cuando estén forrados, claro. Citando al gran Jaume Perich (de memoria, o sea que tampoco os toméis la frase al pie de la letra): los pobres votan a la derecha para dejar de ser pobres; los ricos votan a la derecha para que los pobres lo sigan siendo.

A pesar de la evidente incompetencia (o tal vez para querer disimularla), la Moncloa ha divulgado hoy un documento en el que se afirmaba: Las medidas presentadas hoy por el Presidente Zapatero, en el Congreso de los Diputados, suponen un esfuerzo colectivo sin precedentes (lo han puesto en negrita, que se ve que así el esfuerzo colectivo parece mayor). Suena bonito, no digo que no, pero cuando ves cómo los políticos siguen campando a sus anchas con sus sueldazos, sus dietas y sus distribuciones absurdas del dinero público (los miembros del gobierno se van a bajar el sueldo un 15%, y lo celebramos, pero siguen chupando una barbaridad), cuando ves que los mismos empresarios que han provocado la crisis con su avaricia sin límites y su libre interpretación de la ley siguen en sus puestos, cuando ves tantas y tantas injusticias, piensas que, con todos los respetos y sin la intención de faltar a nadie, el esfuerzo colectivo lo hagan sus putas madres.

Y es que no podemos dejar de felicitarnos por este hecho de justicia pública: Ya era hora de que el coste de la crisis recayera en sus verdaderos responsables: los pensionistas, las futuras madres y los funcionarios. Estos sectores, con sus decisiones alocadas, han contribuido a llevarnos a todos al abismo. Bravo por dejar intactas las Sicav, donde las grandes fortunas tributan al 1% (mientras las rentas del trabajo lo hacen hasta el 43%). Bravo por dejar intactas las ayudas, subvenciones y exenciones fiscales de la Iglesia católica (IVA, IBI, etcétera). Bravo por dejar intacto el presupuesto de la Casa Real. Bravo por dejar intactas fiscalmente las jubilaciones multimillonarias de los ejecutivos de la banca (ese sector ayudado con el dinero público). Bravo por aplicar las medidas del PP antes de que llegue al poder. Sólo echo en falta alguna que otra medida como el despido libre o la privatización de la sanidad. Pero todo eso y mucho más lo tendrá que hacer el PP cuando alcance el poder. Nos aguarda un futuro esplendoroso.

Los funcionarios muy ilusos ellos piensan más o menos así: El Gobierno me va a bajar el sueldo un 5%; lo asumo. Estamos en crisis y hay que arrimar el hombro. Me dirijo al banco con el que tengo contratada una hipoteca para pedir que me rebajen la cuota mensual un 5%. No lo asumen; se ríen. Para acabar descifrando el siguiente silogismo: Arrimar el hombro en tiempos de crisis es de patriotas; yo arrimo el hombro, luego soy un patriota; los bancos no arriman el hombro luego... aquí siempre somos los mismos los que pagamos el pato.

Como el gobierno por fin se ha desenmascarado y muestra en su totalidad y asqueroso esplendor su perfil neo-con en materia económica y tenemos unos sindicatos adormilados profundamente mirándose su ombligo de estómagos agradecidos nos encontramos con unos precios por las nubes en todo, dando igual artículos de lujo, de primera necesidad, transportes, combustibles, paellas en los chiringuitos. El paro prosigue su escalada progresiva y por el otro lado tenemos ese gran partido de la oposición, oponiéndose precisamente a lo que habían venido demandando todos estos meses de atrás: Recorte del gasto público, congelación de los sueldos de funcionarios, pensionistas, etc. etc. Estos de la calle Genova, con tal de oponerse se oponen a todo. Son los que verdaderamente sufrimos la crisis en los que debemos confiar nuestro futuro, nuestro voto. Si esos que controlan las altas esferas de la justicia, dictaminando sentencias al gusto del consumidor, pidiendo eso sí respeto a las decisiones judiciales, menos cuando les tocan lo suyo. El partido de los ladrones, los que quitaron la fiscalía anticorrupción, los de las enormes ayudas a la iglesia católica y los que financian con dinero público las apariciones como estrellas de rock de los emisarios de nuestro señor... Los mismos que se asocian con empresarios y banqueros de dudosa moral que se jactan de pingües beneficios pagados por todos. Y todo ello bajo el auspicio de la comunidad internacional, los del Euro, los liberales, los que exprimen y ahogan Grecia pero no tienen problemas en mantenerles la venta de armas. Se cierran exportaciones griegas de leche, pero se mantienen las importaciones de los helenos en materia militar... Joder, ¡cómo está el patio!

P.D.: Porque todo no son malas noticias... o sí: ¡¡¡¡ Moncloa Palace!!!


jueves, 13 de mayo de 2010

Ese Atleti




Muchos años de infortunio. De en noviembre utilizar apelativos como temporada nefasta, de transición. Coquetear con descensos y el transcurrir de años de monotonía sin altibajos y mucho menos con objetivos de gloria. Decisiones controvertidas. Emociones y esperanzas que en realidad eran errores y penurias disfrazadas de sueños. Apelar al espíritu, la raza o el orgullo a los distintos mercenarios que iban enfundados en colchones. Gestiones deportivas y económicas dantescas, irracionales, casi criminales. Y caminar cada día, cada domingo, por esa senda de los elefantes sin más compañía que una afición. ¡Y qué afición!. Cansados y amargados de derrotas pero cada vez más entusiasmados con el equipo. Gradas repletas, bares y peñas donde se unen nostálgicos y soñadores. La esperanza es lo último que se pierde. En el caso del Atlético de Madrid es eterna, inamovible, victoriosa frente al desaliento.

Idiosincrasia del pupas que te hace sufrir cuando gana, llorar con cada gol histórico y con el alzar de las copas cada vez más ajenas a vitrinas otrora asiduas. La piel de gallina y la voz resquebrajada. 14 años desde el doblete esperando otra alegría para visitar a Neptuno con algo que pueda hacerle sombra, que sea capaz de llegar a la altura del tridente. La pasión por una forma de vivir, siempre al limite paseando entre la desgracia y la victoria. Cuando más díficiles se ponen las cosas más coraje de su escudo saca, más altos son los gritos de la afición, mayor valentía aflora ese corazón rojiblanco.

El atleti de los fichajes sonrojantes (lista innumerable y grotesca), el de los jugadores que antes o después de su militancia colchonera desplegaron un fútbol de nivel... entrenadores de carácter y más que válidos que no triunfaron (Aguirre, Manzano, Sacchi, Luis Aragones, Menotti,...). Todo ello con el yugo de una familia dueña del club, una mano en la sombra que lo mueve todo. Todo menos el corazón y el orgullo de sentirse atlético. Una manera de vivir, de sentir y sufrir; un estilo para perder o ganar, un coraje y un orgullo ante la vida.

La fuente de Neptuno volvió, 14 años después, a albergar la celebración de un titulo por parte del Atlético de Madrid tras una agónica victoria en la prórroga ante el Fulham inglés. Como una guía para entender al club se desarrollo la final, en la que se pudo perder y ganar al mismo tiempo. Se enseño la calidad de los Aguero, Forlán, Simao, Reyes, Jurado, Ujfalusi, Domínguez o De Gea (estos dos últimos con los valores de la valerosa y siempre productiva cantera rojiblanca). Y también los errores inexplicables de gente que te hace pensar cómo es posible que juegen al fútbol (Assunçao y Perea) o por qué eres ahora tan malo (Raúl García, Salvio). Todo esto movido por un entrenador, Quique Sánchez Flores, que llegado al mes de comenzar la temporada ha sabido devolver la confianza a los jugadores, formar un equipo con pocas fisuras, aplicar sapiencia y paciencia y con una carestía de piezas alarmante, llegar a jugar más de 60 partidos esta temporada, con apenas 12 o 13 jugadores, que por una vez, mostraron apego, compromiso y orgullo.

El atleti vivió por momentos preso de la ansiedad, víctima propiciatoria de su historia y también de un rival sin peso ni talento; para al momento mostrarse dominador, grande, favorito, moviéndose como pez en el agua, cómo si jugara finales todos los días, como si fuera capaz de tener el nivel de su afición.

Fue Forlán, el uruguayo, el que encontro el camino del gol, siendo el segundo, el de la victoria, a 5 minutos del final de la prórroga, desatando toda la euforia y rabia contenida de años de maldiciones y lamentos. Forlán se asoció una vez más (y espero que no la última) con Aguero y entre ambos encontraron las llaves para abrir la puerta a la gloria y así, renovar un poco la sala de trofeos.

El mundo atlético esta inmerso en las celebraciones, cuando en una semana puede levantar la Copa del Rey y firmar un doblete histórico que debe pasar a una consolidación del proyecto a un punto de guía en el camino a seguir para volver a hacer, más o menos, habitual el paso por finales, la recolecta de títulos. Dejar atrás el apelativo, el estigma del pupas es el reto y aunque se presume la permanecia de buena parte de la plantilla, es la renovación del hombre que ha hecho posible la recuperación anímica y deportiva de estos hombres, lo que se antoja como calve. Quique Sánchez Flores es el artífice de la victoria de ayer y de devolver la esperanza y la alegría al Manzanares y tiene que ser él, y no otro el que lídere una plantilla, basada en la actual y con 2 ó 3 retoques de calidad, más la categoría de una de las mejores canteras del contienente, el asalto a cuotas mayores, a ser realmente y de manera continúa una alternativa a los dos grandes.

Para salir del yugo de los Gil todavía habrá que sudar más, a menos de que llegue algún foráneo forrado que decida apostar por este caballo, otrora Imprerioso, hasta hace poco perdedor y esperemos que a partir de ahora ganador.

Todo esto y mucho más es el atleti. Ese desgarrado sueño de victoria con las manos desnudas. La sensación de haber hecho lo imposible y sentir el estruendo de una nueva caída bajo las fuerzas ocultas, los poderes o la mala suerte. Las noches de vigilia, las colas de entrada al campo. Las horas de tedio deportivo y de espectáculo nulo. Sentir los colores rojo y blanco es en esencia un estilo de vida. Ser del atleti implica saber sufrir, llorar con las victorias y reir en las derrotas.



martes, 11 de mayo de 2010

El arte en brazos de la República


Se presenta ahora en Valencia la exposición Arte Salvado que rememora y difunde, siguiendo la misma ruta que dispuso el Gobierno de la Segunda República, el azaroso tránsito hasta Ginebra del patrimonio artístico español durante la Guerra Civil, amenazado por el brutal asedio franquista sobre la capital del Estado. Las octavillas de la aviación fascista en agosto de 1936 lo dejaban muy claro: “Si los madrileños no obligan al Gobierno y a los jefes marxistas a rendir la capital sin condiciones, declinamos toda responsabilidad por los grandes daños que nos veremos obligados a hacer para dominar por la fuerza esa resistencia suicida. Sabed, madrileños, que cuanto mayor sea el obstáculo más duro será, por nuestra parte, el castigo”. El historiador Hugh Thomas es muy explícito al comparar los efectos de los bombardeos tres meses después: “Las terribles llamas hacían que la capital semejase algún primitivo lugar de tortura”. César Falcón, periodista y escritor peruano, tuvo la lucidez de advertir que aquel primer ataque aéreo del fascismo sobre la población civil era el destino que aguardaba a otras capitales europeas.

El 16 de noviembre, los aviones nazis dejaron caer sobre el Museo del Prado hasta 12 bombas que, si no causaron más daños que la rotura de un bajorrelieve italiano, fue porque la dirección de la pinacoteca había preservado semanas antes los fondos en los sótanos y había cubierto la cúpula del edificio con sacos terreros. Una vez creada la Junta de Defensa del Tesoro Artístico, presidida por el pintor extremeño Timoteo Pérez Rubio, el Gobierno republicano tomó la determinación de trasladar los fondos del museo a Valencia. El 10 de diciembre salió el convoy que, junto a otras obras, transportó Las Meninas a una velocidad de marcha de 20 kilómetros por hora. La excesiva altura de la extraordinaria obra de Velázquez deparará una de las anécdotas más ilustrativas de la meritoria custodia del arte español por los caminos de un país en guerra, ejemplo del celo, meticulosidad y pundonor puestos en el empeño por el Gobierno de la República. Como la estructura metálica superior del puente de Arganda no permitía el paso del camión que transportaba la obra, hubo de ser trasladada por la noche, a brazo y sobre rodillos, en medio de un frente de combate.

La recreación de esas imágenes, así como la ingeniosa instalación con la que el arquitecto Joselino Vaamonde habilitó las Torres de Serrano en Valencia para proteger las pinturas allí almacenadas, consta en un magnífico documental de Alberto Porlan, realizado en 2004: Las cajas españolas. En Figueras, última etapa del traslado por la península, el Comité Internacional para el Salvamento del Tesoro Artístico Español garantizó la conducción de las cajas hasta su depósito en el Palacio de la Sociedad de Naciones de Ginebra. Para que tal destino fuera posible, el ministro de Estado y el propio presidente de la República tuvieron que apostarse en las carreteras de la diáspora con objeto de requisar los camiones, desalojándolos de armamento y demás vituallas, e incluso de heridos. La avería de algún vehículo obligó otra vez a recurrir al brazo para transportar los cuadros por los pasos fronterizos.

El tesoro artístico español salió de Perpignan el 12 de marzo de 1939. Nunca antes en la historia un patrimonio de tal valor y magnitud había sido transportado, mucho menos en tan adversas circunstancias. Fue tan masiva la afluencia de visitantes que acudió a la gran exposición montada en Ginebra que se consideró el evento como el hecho artístico más importante del siglo. La Segunda Guerra Mundial interrumpió la exhibición de la muestra. El muralista catalán José María Sert logró que el ministro francés Monzie habilitase un tren especial para verificar el traslado a España. El trayecto durante la noche del 6 de septiembre se hizo sin luces para evitar el riesgo que por segunda vez podían correr las obras del Prado bajo la aviación fascista. Tres días después, las 1.868 cajas españolas llegaron a Madrid sin más rasguño que una pequeña desgarradura en el cuadro de Goya Los fusilamientos del 3 de mayo de 1808 tras un ataque de la artillería franquista en Benicarló.

Deliberadamente tergiversada y difamada durante el franquismo, la salvación de tesoro artístico español debería ser hoy una lección básica de cultura cívica a impartir entre las jóvenes generaciones. A cuantos colaboraron en aquel empeño sólo les llegó un primer y tardío reconocimiento en 2003 con la colocación de una placa en su recuerdo en el Museo del Prado. Otro homenaje simbólico, todavía con más retardo, tuvo lugar a primeros de este año con la imposición de una serie de medallas por parte del presidente del Gobierno.

Azaña antepuso la salvación del arte a la del régimen que presidía, pues el primero es irrepetible y el segundo no. Franco estuvo dispuesto a conquistar Madrid e imponer su dictadura aunque fuera a costa de bombardear una de las primeras pinacotecas del mundo. Después, cuando todo ese gran patrimonio protegido por la República volvió a nuestro país íntegro, sano y salvo, aún tuvieron los españoles que soportar que se lo debían “a la fina sagacidad del caudillo”, según la consigna de la prensa a su servicio. Que durante casi 40 años se haya impuesto tan sarcástica soflama y que hayan tenido que pasar más de 30 años en democracia para empezar a saber la verdad de los hechos, debería ser otro motivo más de reflexión y preocupación sobre las menguas y flaqueza de nuestra memoria histórica.

Más móviles que retretes

Según un estudio de la Universidad de las Naciones Unidas, en India hay una media de un teléfono portátil por cada dos personas pero solo una de cada tres puede hacer sus necesidades con dignidad en un servicio: hay más móviles que retretes.
Muchas personas siguen pensando que eso es una consecuencia de la “soberanía del consumidor” que gobierna el “libre mercado”: se fabrican más móviles, dirán, porque hay más demanda de ellos que de retretes y gracias a ello la economía va mejor porque se aprovechan mejor los costes y se obtienen más beneficios.

A mí me parece que ese criterio es falso, sabiendo que la falta de agua corriente y de sanitarios decentes ha provocado la muerte de 4,5 millones de niños en los tres últimos años.

¿Qué ocurre, que estos niños o sus padres y hermanos no tienen necesidad de agua limpia y por eso no la demandan? ¿No será que, por mucho que la reclamen, su demanda no la va a satisfacer el mercado porque no tienen dinero para comprarla?
Por eso creo que el mercado es un mecanismo incapaz de satisfacer las necesidades sociales. Dejar la provisión de los bienes básicos al mercado es lo que hace que haya cientos de millones de personas insatisfechas. Es lo que provoca que cada día mueran más de 30.000 personas de hambre y más de 5.000 por falta de agua limpia.

Los defensores del “libre” mercado me responderán que eso es inevitable porque si no hay dinero para comprar no se podría fabricar nada puesto que los productores no podrían recuperar su inversión.

Es un argumento con trampa porque sólo tiene en cuenta los costes privados de producir y los ingresos privados de las ventas. Según el mismo estudio, cada dólar dedicado a producir retretes para los pobres proporciona un retorno de 34 dólares en forma de incremento de la productividad y de ahorro de costes asociados producido al disminuir la pobreza y mejorar la salud (y eso sin contar el beneficio inmaterial de evitar la muerte y la miseria). Es decir, 34 dólares de beneficio que los productores de retretes no toman en cuenta porque no llegan a sus bolsillos.

El mercado ni siquiera es eficiente en términos de costes e ingresos porque sólo cuenta los beneficios o pérdidas privados pero no los totales que se producen en el conjunto de la economía y la sociedad. En contra de lo que se dice, el capitalismo no sirve para producir mucho de todo. Se produce más de lo necesario de aquellos bienes que tienen detrás mucha gente con dinero para comprarlos, pero produce demasiado poco de lo que tiene más beneficios sociales que privados. En el capitalismo que deja la producción de lo necesario en manos del mercado se produce menos de lo que de verdad necesitan los seres humanos: el mercado y el capitalismo son unos auténticos productores de escasez.

El 20% más pobre de la población mundial consume menos del 1,5% de los recursos; el 5% de la carne, el 5% de la energía el 1,5% de las líneas telefónicas, el 1,1% del papel y el 1% de los vehículos, mientras que el 20% más rico del planeta consume el 85% del total, el 45% de la carne, el 58% de la energía, el 74% de las líneas telefónicas, el 84% del papel y el 87% de los vehículos. Según Naciones Unidas, una de cada cinco personas en el mundo no llega a consumir 20 litros de agua al día (y cuando lo hace está contaminada) cuando al menos se necesitan unos 50 litros, mientras que en países como, España cada persona consume una media de 171 litros por persona, 40 o 50 de los cuales se gastan solo tirando de la cadena en los retretes. En Europa unos 200, y en Estados Unidos casi 700 litros.

Yo creo que hay que ser muy ingenuo para creerse estas milongas del mercado libre y de la soberanía del consumidor. Y así nos va, dedicando los recursos a hacer que la gente con dinero cambie de teléfono cada dos por tres mientras dejamos sin agua o alimentos básicos a miles de millones de personas. Aunque eso sí, oyendo a cada momento que el mercado es la solución de todos nuestros problemas.


Camareros: Necesarios, degradados y precarios. Una experiencia personal

Ahora que ya está aquí el veranito con su calor plomizo, pegajoso y hasta criminal, se llenan las terracitas para tomar unas...