Mostrando entradas con la etiqueta sentimientos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta sentimientos. Mostrar todas las entradas

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Sueño Contigo





Tiembla mis sentidos, me excita tu aroma de mujer
y tu silueta desnuda, bella...cual privilegio por los
dioses me cautiva, siento el dominio de tus labios
rojos y suaves cuando bebes de mis labios para


calmar tu sed, afrodisíacos sabores surgen de
nuestras bocas en un juego de lenguas que se
entrelazan de deseos, secretos que quedan al
descubierto en cada caricia que recorre por

nuestra piel en avisos indecorosos, susurros
suaves se penetran en tu intimidad en un reflejo al
tacto de mi deseo, succionando el sabor de tu
deseo tan húmedo...tan exquisito... tan sublime, es

un placer infinito que nos envuelve, mezcla de
suspiros y gemidos formando explosiones vivas
que surgen de nuestras entrañas, sueños eróticos
nos embarga la humedad del deseo, es una

excitación imborrable que se impregna en la piel
de jugosas sensaciones entrelazadas por nuestros
sexos, perfume exquisito que se filtra en la piel por
el placer y la lujuria que arrebata nuestros sentidos,

y en el silencio de nuestras miradas que nos invade
el placer de lo que no podemos ocultar...tan
presente es el manantial de la excitación... que nos
atrapo en sus redes que no deseo dejar de amarte.

lunes, 19 de marzo de 2012

El miedo como método de venta


No veo mucho la televisión. Y muchísimo menos la publicidad. Pero esta tarde entre sueños y reposiciones de La que se avecina, me desbelé con el anuncio de Securitas Direct.

La televisión más allá de con espectáculos deportivos, el Salvados, Días de cine, el descubrimiento Top Gear o algún que otro espacio de humor, como medio de comunicación hace ya un tiempo que no me ofrece nada salvo espacios de información de la tv pública o La2Noticias. Teniendo en cuenta esto, llego a la conclusión que el 85% de la programación televisva en este país, me indigna, me insulta y me estomaga. A la publicidad nunca le he hecho demasiado caso, más allá de las kaatxondas de los anuncios de especial K, pero lo de hoy me ha parecido bochornoso.

El anuncio de Securitas Direct, presentando por un tipo al que respeto(-aba) por su profesionalidad periodística, como es Mario Picazo, me parece de una bajeza moral, de una vileza rastrera descomunal, puesto que no se limita a utilizar el miedo como arma de persuasión en el objetivo de la venta del sistema de seguridad que ofrece la compañía; sino que además en una suerte de empatía con el televidente le advierte, le amenaza y le exhorta a evitar poner a su familia en peligro con la adquisición de la "maravillosa" alarma de Securitas. Más allá de incluso violar la privacidad de una familia montando un "Gran Hermano" que funciona bajo el botón de una empresa, el recurso del miedo, del terrorrismo, como fusil de marketing es una práctica que a mi, personalmente, me parece vomitiva, por mucho que ya tengamos experiencia en tragar con ella y con los gobiernos como ejecutores (recordemos un momento alegatos con el terrorrismo etarra, o de cualqueir signo, la Gripe A, etc.).

Mario Picazo aparece sobre un fondo que es un salón desordenado de un hogar de periferia amueblado en IKEA, mientras va narrando como entraron los ladrones cuando los dueños no estaban en la casa y que perdieron todo lo de valor que tenían en ella. A continuación, aparece una foto en un marco (creo haber visto marco y foto unidos en la exposición de marcos del leclerq) que según la narración de Picazo no tuvo tanta suerte y se encontraba en la vivienda cuando esta fue asaltada por los ladrones, insinunando de esta manera, el fatal desenlace de una manera cruenta y barbara. Todo ello por no tener contratada una alarma de Securitas Direct.

No es nuevo, ni mucho menos, el uso del miedo como una de las armas más poderosas de sugestión, atacando los impulsos más primarios de la condición humana de una manera fiable y con amplios resultados en la historia. No hace falta más recordad como por parte de diversos colectivos de ultraderecha se usa el miedo contra el diferente para buscar apoyos y coaliciones en favor de la xenofobia y el racismo. El miedo es usado como un elemento de persuasión que nos obligue a consumir y a obedecer. A través de él, es fácil reconocer como desde que el consumismo y el capitalismo dirigen nuestras vidas se nos crean una serie de necesidades, irreales, que alimentan una sensación de pánico que obliga cada vez más a los ciudadanos a recluirse en sus casas. Sólo se puede salir para consumir. Las necesidades creadas por poseer grandes casas nos crean miedos, miedo por mantener a salvo esas propiedades e inseguridades por permanecer en ella, consumiendo cada vez más y más productos que nos mantengan a salvo dentro de las propiedades y alejándonos de la vida social, sumergiéndonos en un bucle agorafóbico que nos separe del resto de semejantes mediante el binomio miedo y seguridad.

Este anuncio funciona a la perfección con los pretextos que el neoliberalismo y las élites oligárquicas utlizan desde los años 80 para controlar la voluntad y la vida de los ciudadanos, como tan bien mostró Naomi Klein en la Doctrina del Shock. El miedo y su uso en medios de comunicación y publicidad, es un fantástico elemento de persuasión a la movilidad social, la investigación y la acción popular. Me parece lamentable que las autoridades audiovisuales, AutoControl o algún responsable si es que los hay que no solo estén para cobrar del erario público, hayan dado visto valido a un spot que se salta toda la deontológica publicitaria y literalmente miciona sobre los libros de buena praxis de marketing y publicidad. Nuestro funcionamiento como ciudadanos, que no sólo somos memos consumidores, es denunciarlo y utlizar la capacidad crítica, la inteligencia y la denuncia para desterrar el apeló más rastrero y nauseabundo a los sentimientos e instintos más básicos para aumentar la cuenta de resultados de esta o aquella empresa.

Esta tarde se me han revuelto las tripas al ver el dichoso anuncio del video. Yo nunca tendré una alarma de esta empresa, y no sé si de alguna otra. Pero lo que tengo claro es que jamás podrán borrar la voluntad popular, que es nuestra voz, con un uso tan abusivo, escatológico y brutal del miedo, porque los que tienen que tener miedo son ellos, porque nosotros somos más y mejores.

lunes, 20 de abril de 2009

La Caja de Zapatos





Escribo sin parar. Hay veces en las que las ideas y los sentimientos se agolpan en mi cabeza con intención de salir. Tengo que darles forma, buscar palabras y expresiones que den cuerpo y vida a todo lo que pasa por mi corazón o mi cabeza. A veces las fuerzas fallan y la inspiración se ha marchado... escribo mierdas que no llegan ni siquiera a cabrearme cuando las recito en alto. Con el ordenador es fácil seleccionar el texto y borrarlo pulsando Supr. Pero cuando lo hago en papel el halo romántico de arrancar una hoja y hacerla una bola para posteriormente lanzarla en suspensión al vacío es un acto que me seduce, pero que casi nunca hago. Si he agarrado un boli y un trozo de papel escribo no para gustarle a nadie, sino para soltar mis miedos y mis gritos en silencio. Con la letra prácticamente ilegible, luego me cuesta horrores saber que dije... Escribo con pasión, con furia, desatado, sin atender a razones estilísticas, prácticamente escritura automática que saca a relucir todas mis pasiones y temores, todos unidos para dibujarme.

No recuerdo muy bien cuando empece a escribir, a contar todo lo que me atacaba o gustaba. Quizás sería con 13 o 14 años. A veces no sabes a quien acudir. Tienes miedo, estas sólo y el vacío es intenso y total. En la soledad de una habitación intentas mil avatares, pero la necesidad de gritar es tan grande como el horror a que te llamen loco por hacerlo. Y con la luz azul del flexo iluminando un pequeño espacio en la mesa, con la persiana bajada, sólo dejando los agujeros para no olvidar que hay algo ahí fuera, cogía un trozo de papel y empezaba a escribir lo que sentía.

Poco a cambiado desde entonces. Ahora tengo un ordenador, montón de redes sociales, un blog, ganas de hacerlo todo y también tiempo. Los mismos miedos e incertidumbres siguen acechando por lo que no se sabe si hemos evolucionado, involucionado o soy un rebeldes porque el mundo me hizo así. Yo creo que estamos como estamos porque somos una segunda generación X. Si los literatos estadounidenses nacidos en los años 70 son una, aquí y ahora, la gente que tenemos esta edad de los "casi 30" seguimos inmersos en la rutina diaria, pero con la certeza de que apenas crecemos, de que desarrollamos nuestras vidas acorde a nuestros sueños, instintos o necesidades. En eso personalmente, a parte de arriesgarse, poco podemos hacer, y de los que corren el riesgo, pues calculo que a 50% se debate el éxito y el fracaso. El caso es que escribir y hacerlo libremente es un lujo gratuito del que pienso que pocos hacemos un uso continuado. A lo mejor por miedo guardamos esa confesión del propio hecho de la escritura y sus resultados, algo que yo hago porque no todo lo que escribo es lícito de ser publicado, porque haría de mi... no lo sé exactamente, quizás sea este temor lo que me haga seguir haciéndolo.

En una caja de zapatos negra con ribetes blancos podría ser mi "arca perdida". Un tiempo lo fue y su recuerdo es la reminiscencia de tiempos analógicos. Ahora conservo algunos de aquellos relatos, cuentos y confesiones, aunque hay muchos que pasaron a mejor vida... La caja dejo paso a un par de cuadernos, a hojas sueltas que en algún momento atacó y también incluso alguna servilleta porque tomando un café se me ocurre algo que merece ser contado y hecho sueño de tinta y grafía. En ocasiones me tiro meses sin escribir nada, otras lo hago hasta 3 veces al día... No sé porque escribó pero si sé que cuando lo hago me siento mucho mejor y esa ya es una simple razón para seguir haciéndolo.

Camareros: Necesarios, degradados y precarios. Una experiencia personal

Ahora que ya está aquí el veranito con su calor plomizo, pegajoso y hasta criminal, se llenan las terracitas para tomar unas...